La escudería Mercedes, con el líder del Mundial Lewis Hamilton a la cabeza, buscará recuperar el mando en el Gran Premio de Bélgica tras la locura de la última carrera en Hungría, en la que el alemán Sebastian Vettel (Ferrari) rompió una racha de siete victorias del equipo líder.

La Fórmula Uno vuelve a la competición en el circuito belga de Spa-Francorchamps, un mes después de que la carrera en Hungaroring casi pusiera patas arriba la clasificación del Mundial de pilotos, en la que el alemán Nico Rosberg (Mercedes) tuvo en sus manos desplazar de la primera plaza a su compañero y bicampeón mundial.

No lo logró el teutón porque Hamilton protagonizó una gran remontada del decimotercero al sexto lugar, y porque el australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) colaboró inesperadamente en un intento de adelantamiento en el que le pinchó una rueda, con lo que Rosberg terminó octavo. La vida siguió igual, con 21 puntos de ventaja para el británico sobre su compañero en la lucha por el título.

Pese a la victoria en la lucha interna, la carrera no fue positiva para un Hamilton que partía de la primera posición de la parrilla y cometió varios errores desde el inicio de la carrera. Y, por si fuera poco, el triunfo de Vettel, además de romper la hegemonía de Mercedes en los últimos siete Grandes Premios, ubica al tetracampeón mundial alemán con 160 puntos, a 42 del liderato en una competición en la que el vencedor de cada carrera recibe 25.

Si Hungría presenció una carrera entretenida, Spa reúne las condiciones para serlo entre los monoplazas más veloces. Dos sectores de velocidad punta (primero y tercero) y un segundo con varias curvas complicadas ofrecen terreno abonado para los adelantamientos. La mítica curva en subida 'Eau Rouge' es otro de los alicientes.

Se suma al espectáculo el pronóstico meteorológico, que augura hasta un 40% de probabilidad de lluvia para la carrera del domingo, en la que el año pasado ya se pudieron ver tiranteces entre los dos Mercedes, con una controvertida maniobra de Rosberg que provocó el pinchazo y posterior retirada de Hamilton. La carrera la terminó ganando el australiano Daniel Ricciardo (Red Bull), con una buena estrategia en la primera parada.

Spa-Francorchamps será una buena prueba también para la fortaleza de los Ferrari, con el espaldarazo que supuso la victoria de Hungría para Vettel y la confirmación que ha sido la renovación del contrato del finlandés Kimi Raikkonen este miércoles. El finlandés es el piloto en activo con más victorias en Spa: cuatro triunfos.

También podría ser un buen fin de semana para recuperar para el espectáculo al equipo Williams, al que la potencia de su motor Mercedes le otorga ventaja en los sectores de aceleración a fondo, y cuyos dos pilotos se quedaron sin puntuar en Hungría.

Menos optimista se presenta la carrera para el español Fernando Alonso (McLaren), que logró su mejor resultado del año en Hungría -donde fue quinto-, pero que sabe que será un espejismo con respecto a la carrera de este fin de semana, que exige un monoplaza con más velocidad punta que el que actualmente le ofrece Honda.

Precisamente por esto, el fabricante japonés aprovechará este Gran Premio para traer unidades de potencia nuevas y piezas de prueba, con lo que es probable que tanto Alonso como su compañero británico Jenson Button afronten la salida con penalizaciones por el cambio de componentes.

El lastre de la velocidad punta también podría acompañar a Carlos Sainz (Toro Rosso), cuyo monoplaza sufre más en los circuitos de acelerador a fondo y que acumula infortunios en las últimas carreras, con cuatro abandonos consecutivos por motivos técnicos.

El Gran Premio de Bélgica se disputa en el circuito de Spa-Francorchamps, el más largo del Mundial con una longitud de 7,004 kilómetros y al que se dan 44 vueltas. Es uno de los circuitos que inauguraron la Fórmula Uno en 1950 y el cuarto más veterano tras Monza, Mónaco y Silverstone.

El alemán Michael Schumacher es el piloto más laureado en el trazado de las Ardenas belgas, en el que se proclamó vencedor en seis ocasiones entre 1992 y 2002; mientras que el brasileño Ayrton Senna ganó cinco carreras en Spa entre 1985 y 1991.

De los pilotos en activo domina Raikkonen con sus cuatro triunfos (2004, 2005, 2007 y 2009) en Spa, seguido por Vettel con dos (2011 y 2013) y Hamilton con una victoria (2010).