El Barcelona busca hoy un "milagro" para remontar el 4-0 que el Athletic Club le endosó en el partido de ida de la Supercopa de España, el que podría ser su quinto título de 2015 y que podría mantener vivo el sueño del "sextete" que se tambalea para los de Luis Enrique.

Apenas 72 horas después del desastre de San Mamés, los azulgranas intentarán darle la vuelta a la eliminatoria en un Camp Nou que registrará una gran entrada, pero con un ambiente poco habitual, porque buena parte de los socios culés están de vacaciones.

El estadio se llenará por tanto de un perfil poco habitual, el que conforman barcelonistas buscando asientos y turistas con ganas de ver al campeón de Europa. Además de bilbaínos deseando celebrar en primera persona un título con su equipo.

Aun así, jugadores y técnicos coinciden en que el apoyo del Camp Nou será esencial para crear la atmósfera necesaria con la que el Barcelona pueda recuperar la solidez defensiva que exhibió la pasada temporada. Un factor clave, ya que en los dos últimos partidos, el Barça ha encajado ocho goles -cuatro del Sevilla y otros cuatro del Athletic- algo que no sucedió ni una sola vez la pasada campaña. Y de recibir de nuevo esta noche algún tanto en contra arruinaría definitivamente las opciones de los azulgranas.

Para ello, Luis Enrique apostará esta vez por la primera unidad para buscar la remontada. Regresarán por tanto al once Piqué, Mathieu, Busquets, Iniesta y Rakitic, además de volvera a situar a Mascherano en el eje de la zaga. Un equipo de gala en el que habrá dos ausentes, Alba y Neymar; y una sola incógnita: la portería.

El asturiano deberá decidir si mantener a Ter Stegen pese a los dos desafortunados partidos que ha cuajado el alemán, o alineará a Bravo por primera vez esta temporada.

Por su parte, el Athletic Club encara la vuelta de la Supercopa como una oportunidad histórica para volver a abrir sus vitrinas 31 años después, animado por el rotundo 4-0 en San Mamés.

Con los seguidores rojiblancos aún extasiados por la exhibición de su equipo, Ernesto Valverde y sus jugadores han preparado la cita conscientes de la gran oportunidad que tienen ante sí, pero también desde la más absoluta prudencia a la vista del enorme potencial de su rival. Y es que, como todos los "leones" señalaron tras la goleada en "La Catedral": "si hay un equipo capaz de levanter un marcador tan rotundo ese es, sin duda, el Barça".

Por ello, el Athletic buscará una vez más mantener el alto nivel que mostró en la ida, aunque no lo tendrá fácil pues encara una semana complicada.

El jueves jugará en Eslovaquia la ida del "play off" de la Liga Europa frente al Zilina y el domingo volverá a verse las caras con el Barça en San Mamés en la primera jornada de Liga. Tres grandes citas en solo siete días que obligarán a Valverde a contar con la mayoría de los efectivos del grupo de jugadores disponibles reducido a 20 debido a las bajas de los lesionados Mikel Rico, Iturraspe, Williams y Muniain.

El resultado de la ida y esa posibilidad real de lograr el título quizás animen a Valverde a no tocar demasiado el once que tan buen rendimiento alcanzó en la ida y dejar las rotaciones para la cita con el Zilina, importante pero no decisiva pues el cruce "europeo" se resolverá una semana más tarde en San Mamés, cuya vitrina espera contar con un nuevo título después de esta noche.