Los rumores y la espera entorno a la finalización del «caso Rubiato» llegaron ayer a su fin cuando el jugador madrileño y el Zamora Club de Fútbol alcanzaron un acuerdo para la rescisión de contrato del delantero con la entidad rojiblanca. Una firma finalizaba con varios días de negociaciones y permitía al ariete pasar a ser un futuro enemigo deportivo, ya que se marcha para fichar por el RSD Alcalá.

Las reuniones entre la junta gestora y Borja Rubiato en días previos designaban ayer como la fecha definitiva para acabar con la incertidumbre sobre la continuidad o salida del nueve zamorano. Por ello, no sorprendió que el jugador estuviera ayer por la mañana en las dependencias del Ruta de la Plata y que, cerca de las dos de la tarde, se desvinculara definitivamente del Zamora Club de Fútbol.

Las negociaciones con el ariete, que nunca ha negado que se sentía cómodo deportivamente hablando a las orillas del Duero, resultaron bastante duras pero finalmente tanto el madrileño como la entidad rojiblanca pudieron establecer un acuerdo que parece beneficioso para ambos.

Por una parte, Borja Rubiato se marcha del Zamora Club de Fútbol con la fama de delantero solvente, que luchará por mantener en futuras jornadas. Ocho dianas con la escuadra de Aguirre le han devuelto el cartel de gran ariete tras una mala temporada en el Oviedo, club desde el que vino para sustituir a Jona como «nueve» rojiblanco.

Además, el madrileño podrá cumplir con su principal deseo, regresar a casa con los suyos para seguir disfrutando del fútbol cerca de su familia, aunque en la negociación para conseguirlo haya tenido que ceder en otros aspectos.

Para poder regresar a la capital de España y militar en las filas del RSD Alcalá, club que se acabó por hacer con sus servicios pese a las ofertas de otras entidades con más nombre como el Real Jaén o el Logroñés, Borja Rubiato ha perdonado la cantidad que el Zamora le adeuda de los meses de Noviembre, Diciembre y Enero. Un montante que se une a los sueldos que percibiría el jugador desde ayer hasta el final de temporada y el cobro de una cláusula registrada en el contrato del «nueve» en función de su capacidad anotadora. Pero estas no son las únicas compensaciones que recibirá el Zamora por perder a su máximo goleador.

El club rojiblanco se ha garantizado que, dado el destino del jugador, Rubiato no sea un problema directo en el futuro deportivo del bloque de Aguirre. Notará su marcha, ayudará a un máximo rival, pero cuando el Zamora se mida al RSD Alcalá, el ariete no podrá participar con su nuevo equipo. Además, otro tipo de cláusulas aportarán beneficio al Zamora si el jugador triunfo en los próximos años e interesa a equipos de superior categoría, como acordó ya con el cadista Josete.

Por otra parte, y dado que ahora el club de la capital del Duero tiene que fichar, el club percibirá por la marcha del jugador una cantidad que ronda los 3.000 euros. Cifra que se empleará, principalmente, para tramitar la ficha profesional de un nuevo jugador.

Refuerzos que continúan aún en el aire, ya que pese a que el Zamora Club de Fútbol está peinando el mercado de forma insistente aún no se ha decido por ningún jugador en concreto. Eso sí, el perfil que busca la entidad es muy concreto y pronto podría cerrar algún fichaje.

El Zamora quiere jugadores -prácticamente- a coste cero. Un central y, ahora con la marcha de Rubiato, un delantero; aunque por el momento, la prioridad está en incorporar a un zaguero. Concretamente a un central diestro con buen juego aéreo, y para ello, aunque el mercado sea muy amplio y haya una gran cantidad de ofrecimientos, los rojiblancos buscan un defensor procedente de un filial y que llegue mediante una cesión.

Términos que serán, más o menos, los que se ajustarían al perfil del nuevo «killer» rojiblanco en caso de que llegara antes del 30 de enero. Aunque Chino, Piriz y la vuelta de Sergio García hacen esta necesidad menos acuciante.

BORJA RUBIATO

Procedencia: Real Oviedo

Partidos jugados: 17 (15 titular)

Minutos jugados: 1.366 min.

Goles: Ocho dianas

Destino: RSD Alcalá (Grupo I)

Rubiato señaló ayer, en sus últimas horas como rojiblanco, que se marcha de Zamora «agradecido y triste» por dejar atrás «un vestuario y un club que le han tratado muy bien» y al que desea «mucha suerte en el futuro». La negociación, según el ariete, «ha sido dura», pero finalmente el madrileño ha conseguido lo que quería, «volver a casa». «Lo necesitaba, es cierto que el Zamora atraviesa momentos difíciles pero me marcho por voluntad propia para volver a mi casa tras mucho tiempo y compaginar el fútbol con ayudar a mi padre en el trabajo. Debo ver el fútbol de otra forma», afirmó.