La plantilla regresó a los entrenamientos y lo hizo con varios hombres «tocados», aunque la situación tuvo alguna variante desde la sesión matinal a la vespertina. Por un lado está Jorge Hernández que está cargado muscularmente y prefirieron que no trabajara con el grupo mientras que Borja Rubiato, con un golpe del último partido, sí pudo ejercitarse en la segunda sesión. Dani Mateos, por su parte, realizó carrera continua, aunque fue muy suave ya que se recupera de una sobrecarga en el isquiotibilial derecho, y Josete estuvo aparte por precaución por la brecha que tiene en cabeza tras el golpe sufrido con Edu Payá. El que no tuvo nada de carga fue Sergio Sánchez que arrastra un edema del encuentro ante el Salamanca y prefieren que se recupere por lo que esperarán hasta el viernes o sábado antes de volver a hacer portería. Los canteranos tampoco se libran y Jarabo tuvo que parar por molestias en los abductores.

A pesar de esta situación y de la larga lista de tocados, Aguirre cree que podrá tener a todos listos ya que no se trata de lesiones importantes, aunque habrá que analizar la evolución de cada uno de ellos hasta el sábado, día en el que se decidirá la convocatoria, aunque al ser en casa estarán todos convocados.