La historia del Palencia no termina. Después de que el administrador concursal liquidase el pasado lunes el club y se diera por desaparecido, un grupo de aficionados ha querido hacer un último intento de salvación. Así, contrataron un abogado que, según parece, ha enviado un escrito al juzgado al entender que «paralizar la actividad o decidir sobre la disolución de la entidad es cosa del juez y no del administrador», comentaron desde Palencia.

Ante esta situación, el equipo que ahora mismo queda (once jugadores más juveniles) se desplazará a Bembibre a disputar su encuentro de Tercera División en un viaje que no tendrá coste para la entidad morada puesto que el autobús y la comida serán sufragados por la empresa Autocares Pobes y un particular, respectivamente.

El objetivo de estos movimientos es, presuntamente, ganar tiempo ya que el lunes está prevista la creación de una «Plataforma de Salvación» del Palencia en la que ya estarían integrados varios empresarios de la ciudad y provincia.