El zamorano Martín Ramos, en compañía del asturiano Jorge Egocheaga iniciarán hoy el primer ataque a la cumbre del Makalu, según anunció ayer su página web. Un mes justo después de llegar al campo base, Ramos cree que el sábado habrá una ventana de buen tiempo que intentarán aprovechar para hollar la cima del Makalu (8.473 metros) en la que sería su octava ascensión a un "ochomil".
El resto de los miembros de la expedición: Oscar Fernández, Joëlle Brupbacher, Peter Hámor, Kinga Baranowska y Horia Colibasanu tenían previsto dormir en la noche pasada en el Campo 1 para subir hasta el Campo 2 (6.700 metros) durante la jornada de hoy. Por su parte, Jorge y Martín pretenden realizar la subida en su estilo habitual, es decir, en dos etapas, ascendiendo hoy hasta el segundo campamento, para mañana dejar instalada una tienda en torno a los 7.600 metros y aprovechar el relativo buen tiempo que parecen anunciar las previsiones el sábado para hacer cumbre.
En situación parecida se encuentran otras expediciones españolas en el Himalaya. La expedición Endesa-Edurne Pasaban, que lidera la montañera tolosarra, junto a Asier Izaguirre, Ferran Latorre y Nacho Orviz, partió ayer del Campo Base del Everest con el objetivo de alcanzar la cima más alta del planeta este próximo sábado. Desde el pasado jueves, decenas de personas han llegado a la cumbre en condiciones de viento variable, todas ellas usando oxígeno suplementario. Edurne y sus compañeros, por el contrario, no van a hacer uso del gas embotellado, por lo que necesitan contar con un día de viento en calma para intentar la cumbre.
Por su parte, los miembros de la expedición que lideran Juanito Oiarzábal y Carlos Pauner descansan ya en el campo II (6.400 metros) del Lhotse (8.516) antes de partir para el campo III con la intención acercarse a la cumbre.
«Por el momento se está cumpliendo la previsión meteorológica y apenas hay viento, tenemos un día soleado», relató Pauner.
