Los socios del Zamora CF pidieron ayer al expresidente José María Casas que retome las riendas del club ante la falta de candidatos a asumir la presidencia que quedó de manifiesto en la asamblea general desarrollada ayer en el Colegio Universitario de Zamora. Fue de nuevo una asamblea muy controvertida en la que se produjeron intervenciones muy poco afortunadas y que en nada contribuyeron a clarificar el futuro del club, pero con la irrupción de Casas en el escenario, parece abrirse una puerta a la esperanza.

La actitud del ex presidente continúa siendo muy ambigua o, como se quiera, enormemente clara: «Yo no me presento como alternativa. Me ofrezco a colaborar con quien éste en el futuro» pero, ante la presión para que asuma de nuevo la presidencia, pidió unos días de reflexión para «consultarlo en casa con la familia».

Surgió entonces la posibilidad de aplazar la asamblea hasta el próximo lunes, pero finalmente, y para que no se produzca ningún vacío de poder, tres de los actuales directivos, Chema Pérez, Valentín Blanco y José Luis Peñas, se comprometieron a continuar como gestora frente a otra parte de la directiva que mantuvo la intención con la que habían acudido a la asamblea de presentar su dimisión, entre ellos, el vicepresidente José Miguel López Martínez, quien aludió a motivos personales para dejar el cargo.

No comenzó bien la junta general pues la gestora lanzó un órdago a los socios para que surgiera algún voluntario a presentarse a las elecciones que, según los estatutos, es obligado convocar de forma inminente. No surgió esta vez, como había ocurrido con Manuel Tejedor, ningún voluntario y entonces, el desconcierto comenzó a cundir entre los socios.

Mucho más se complicaron las cosas cuando la gestora presentaba un balance económico con un déficit previsible de unos 435.000 euros, de los 945.000 a que ha ascendido ya el presupuesto. La directiva Milagros García comunicó que actualmente hay en las arcas del club 29.000 euros, una cantidad que ni siquiera permite afrontar la próxima nómina del personal y jugadores del club.

La propuesta inicial era la de que, si surgía alguna candidatura de la asamblea, se convocarían elecciones en breve y, de lo contrario, se postergarían hasta el 4 de junio. «Nosotros vamos a dimitir en pleno y planteamos crear una nueva gestora con socios que estén dispuestos a tomar las riendas del club», explicó Milagros García quien calificó como «crítica» la situación económica. «Ya no podemos seguir porque no tenemos presidente», añadió.

Tras muchos minutos de debate e incertidumbre sobre las soluciones a adoptar ante la falta de iniciativas para evitar el vacío de poder, el socio Juan Rodríguez Santa Cecilia pidió públicamente el regreso de José María Casas: «El Zamora no es un enfermo terminal y no lo era en el pasado mes de junio, lo único que había eran disputas internas. Nos equivocamos entonces de terapia y nos estamos volviendo a equivocar. Solo hay una solución, que se convoquen elecciones y que se nombre una junta gestora. La medicina es la que habíamos tenido que tomar en mayo, la de haberle pedido a quien había llevado el club y había demostrado estar capacitado para ello que regresase, porque el que sabe hacerlo es José María Casas Delgado. Reconozcamos todos los socios que nos hemos equivocado. Casas es la persona que puede y debe asumir la responsabilidad del club», expuso el socio y la asamblea respondió con una aclamación.

José María Casas tomó la palabra para comenzar señalando que «ahora se da cuenta todo el mundo de que esto es muy difícil. En estos últimos meses ha habido errores pero no es el momento ahora de hacer leña del árbol caído. El Zamora tiene solución, estoy seguro, pero con mucho esfuerzo y trabajo. Tenemos que estar unidos pero también hacen falta euros porque milagros no hace nadie. Cada socio tiene su manera de llevar el club, pero todos queremos al Zamora».

El expresidente aseguró que «esta propuesta ha sido para mi una sorpresa. No me esperaba esto. Mantengo que estoy dispuesto a colaborar pero la tarea es muy complicada y difícil. Hay que ver la situación de las empresas y de las instituciones. Nos ha pasado lo que al Gobierno de España, tenemos que afrontar una reforma muy fuerte, dentro y fuera del vestuario y habrá que quitar de todos los sitios que se pueda».

Casas aseguró que la solución a lo mejor se prolonga más de un año pero «al Zamora no se le puede dejar morir. El club es de los socios por suerte y por desgracia» y recordó las advertencias que había hecho en anteriores asambleas cuando él era presidente de que «el Zamora estaba viviendo por encima de sus posibilidades y a lo mejor, debemos pensar si podemos estar en esta categoría o tenemos que estar en otra. En estos momentos es necesaria una reforma pura y dura, hay que hablar muy claro dentro y fuera del Estadio».

Y continuó apelando al «esfuerzo entre todos porque no sobra nadie, somos necesarios todos, pero no solo vale la unión sino generar también los recursos necesarios». Anunció el expresidente que «estoy dispuesto a echar una mano hasta mayo pero hacen falta muchas manos, mucha dedicación y tocar muchas puertas» y continuó su diagnóstico de la situación del club insistiendo en que «habrá que exigirles a las instituciones un poco más de esfuerzo para, entre todos, salir adelante y en junio, sacar una directiva con peso específico».

Y siguió reflexionando: «Estar ahí arriba no es fácil porque, cuando hay que ponerse delante, este toro parece un elefante. Pero al Zamora lo tienen que salvar los socios, un grupo de personas fuerte y unido. Hay que sacar gente disponible, sólo así será posible. Yo estoy para ayudar y colaborar. Contad conmigo.», concluyó antes de recibir una fuerte ovación de los presentes.

Santa Cecilia siguió pidiendo que la asamblea facultase al expresidente para rodearse de su propia junta: «Démosle carta blanca para que resuelva el problema a su saber y entender».

Casas se mantuvo firme en que «yo no me he propuesto como alternativa. Esto me ha pillado por sorpresa y lo primero sería pensarlo y razonarlo. Lo primero es valorarlo en mi casa y con mi familia porque uno, si se decide, tiene que ir con todas las de la ley. Agradezco a todos el apoyo pero tengo que tomarme unos días para pensarlo porque no es lo mismo colaborar que tirar del carro».

La asamblea se complicó enormemente a partir de este momento y comenzaron a surgir intervenciones demasiado personalistas que a punto estuvieron de echar por tierra lo poco que se había avanzado hasta entonces. Finalmente, tres miembros de la gestora continuarán y Casas se lo pensará.

Tal vez un primer paso y un dato que parece indicar que las cosas están cambiando ya en el club rojiblanco fue la moción aprobada, a propuesta de Casas, de que la Asamblea invite a Caja Rural a volver a colaborar con el club y como primera muestra de desagravio, podría decidirse en las próximas horas que el equipo juegue contra la Gimnástica de Torrelavega mañana con la publicidad de la entidad zamorana de nuevo en sus camisetas.