El británico Mark Cavendish (Columbia) se impuso al esprint en la duodécima etapa de la 75a. Vuelta a España, con salida en Andorra y llegada en Lérida, y el español Igor Antón (Euskaltel Euskadi) conservó la camiseta roja de líder en la clasificación general.

Los 172,5 kilómetros fueron recorridos por Cavendish, primer líder de la carrera, en 4 horas y 35 minutos, el mismo tiempo que el estadounidense Tyler Farrar (Garmin) y el australiano Matt Goss (Columbia).

La general no sufre cambios en su primeros puestos y sigue comandada por el español Igor Antón (Euskaltel Euskadi), seguido del italiano Vicenzo Nibaldi (Liquigas) a 45 segundos y el también español Xavier Tondo (Cervelo) a un minuto y 4 segundos.

Una etapa propicia para los esprinters, que debían aprovechar para jugar sus bazas ante la inminencia de la montaña cantábrica. Los equipos de los velocistas se pasaron el día persiguiendo a los 9 corredores que saltaron del gran grupo en el kilómetro 8.

Entre ellos amplia representación del Xacobeo, con tres hombres Veloso, Gustavo Rodríguez y David García, además de Piedra (Andalucía), Bak (HTC-Columbia), Eichler (Milram), Kadri (AG2R), Quemeneur (Bouygues) y Marzano (Lampre).

Los equipos de los esprinters nunca permitieron que el retraso pasara de los 3 minutos. El Footon Servetto del portugués Manuel Cardoso y el Quick Step del belga Wouter Weylandt imprimieron un ritmo muy elevado, imposible de soportar por los 9 fugados, que claudicaron a 23 kilómetros de la capital ilerdense.

Empezó la otra etapa, la definitiva, con el grupo rodando estirado. El Garmin de Tylar Farrar mostraba sus cartas en cabeza, tirando a bloque. Momentos de descontrol con el Euskaltel atento para evitar sorpresas.

Cavendish hizo buenos los pronósticos y se llevó la victoria en una llegada masiva en la que su compañero Goss le hizo un magnífico trabajo, pues lo lanzó perfectamente a la salida de una curva a pocos metros de la línea de meta. El británico es uno de los pocos corredores en activo que sabe lo que es ganar una etapa en las tres grandes: Tour, Giro y Vuelta. La decimotercera etapa, entre Rincón de Soto y Burgos, de 196 kilómetros, otra oportunidad para los esprinters.