Tras la disputa de las tres primeras jornadas y con un injusto, a la par que rotundo, cero en el casillero de puntos, el Inzamac Zamora prepara su partido ante el Aranga BM Soria como si de una final se tratase. El conjunto soriano, con un calendario mucho más benévolo, cuenta sus tres partidos por victorias y tratará de seguir invicto en la Primera Nacional del balonmano española. Así pues, se presenta un choque de altos vuelos en el «Manuel Camba» (a partir de las 18.00 horas), reedición de aquellos grandes partidos que se pudieron ver temporadas atrás en Segunda División antes de que el Aranga diera el salto a la Primera División Nacional.

El conjunto dirigido por Richard Martínez presenta una sólida plantilla que tiene en los centímetros de la primera línea y el pivote una de sus mejores virtudes. El férreo 6-0 con los hermanos Grossi, Javi Santos y Nacho González en el centro, apoyados por Docampo en la portería, suele encajar pocos goles a cambio de recibir muchas exclusiones.

En ataque, el lanzamiento exterior es su mejor arma. Dos solventes extremos como Andrew y Madrigal completan el plantel soriano. Será baja para este encuentro en Zamora por sanción el central Carlos Heras.

La clave del partido estará en el ritmo de juego. El Inzamac Zamora tratará de imponer un ritmo vertiginoso, mientras que a los sorianos les favorece un partido más táctico y a poco goles. Las mejores armas de los zamoranos, a priori de lo visto en las tres jornadas disputadas, serán el extremo Luis Cano «Peli», en estado de gracia con 23 tantos anotados, la defensa 5-1 con un gran Jortos en el avanzado y la gran conexión formada por Octavio-Fernando (central-pivote).