Las zamoranas se vengaron la derrota sufrida en la primera vuelta. Esta vez no hubo bajas y la diferencia fue clara, no tanto en el marcador como en el juego. Siempre llevando el tempo del partido, solo al final las arandinas maquillaron el marcador que llegó a estar hasta con 12 goles de diferencia. La relajación final, que se debe corregir, impidió que el resultado final fuera mucho mas amplio.