La firma de lujo Bulgari, encargada de la restauración de la famosa escalinata de la Plaza de España de Roma, ha propuesto que esta sea cerrada al paso de turistas e italianos, al menos durante la noche, para proteger el esplendor del monumento.

La firma se ha gastado casi 1,5 millones de euros y ha empeñado más de un año de trabajo en devolver el brillo que tenía inicialmente esta obra maestra del siglo XVIII.

Aún permanece cerrada, pues en estos días la firma concluye las últimas fases de su restauración para volver a dotarla de toda su belleza, su inauguración está prevista que sea el próximo 21 de septiembre.

Antes de que sea abierta al público y vuelva a gozar del trasiego diario de miles de turistas y de romanos, el presidente de Bulgari, Paolo Bulgari, ha sugerido que sea cerrada para evitar que vuelva a sufrir daños y se ensucie "con chicles, manchas de café o vino" y otras "porquerías".

Los 135 peldaños que forman la monumental escalinata de la Plaza de España, ha dicho Bulgari, deben ser protegidos frente a actos vandálicos.

"La escalinata es un monumento precioso y frágil, como tantos otros en Roma y en Italia. No se puede consentir que una vez puesta a punto vuelva a ser una cloaca a cielo abierto. No se puede dejar en manos de bárbaros que comen allí, beben y ensucian", dijo.

Bulgari comprende que "pasear por la escalinata es justo", pero matiza, al mismo, tiempo que "no se puede utilizar como una grada de un estadio de fútbol donde la gente se sienta durante horas, emborrachándose y tirando colillas de cigarrillos".

Por eso, ha advertido, "si no se toman las medidas adecuadas, en pocos meses volverá a ser un desastre".

Una de estas medidas, considera la casa italiana de joyas y artículos de lujo, podría ser la de colocar una valla e impedir el paso por la escalinata durante la noche, una iniciativa similar a la que protege, por ejemplo, el Monumento a la Patria en la Plaza Venecia de Roma también durante la noche.

Su fórmula, sin embargo, no ha gozado de la complacencia del Ministerio de Cultura italiano, que considera que la escalinata fue construida para ser transitada y ha rechazado que se pueda proteger el patrimonio mediante rejas.

La impresionante escalinata de la Plaza de España de Roma es uno de los símbolos más característicos de la ciudad, retratada en numerosas postales de Roma, ha sido además imponente escenario de desfiles de moda de las marcas italianas más prestigiosas.

A los pies de la escalinata se encuentra la fuente de la Barcaccia de Bernini, que el pasado año fue objeto de actos vandálicos por parte de algunos hinchas del Feyenoord holandés, quienes causaron en ella "daños imborrables y permanentes", en los enfrentamientos que se produjeron antes del partido de dieciseisavos de la Liga Europa.