Trece parques eólicos ubicados en la provincia de Zamora, a pesar de tener autorización administrativa de la Junta, no están en en funcionamiento por razones desconocidas. Esta situación afecta a 160 parques en toda la Comunidad, algunos de ellos con licencias desde 2001 y 2002, aunque los empresarios apuntan con causa a la falta de infraestructuras de evacuación.

Así figura en la documentación facilitada por la Consejería de Economía y Empleo al procurador socialista Jorge Félix Alonso en una respuesta escrita que firma el consejero Tomás Villanueva, y en la que se informa de que estos parques eólicos, en conjunto, cuentan con una potencia instalada que ronda los 3.900 megavatios, casi el doble de la existente actualmente en Castilla y León.

El consejero detalla en su contestación que su departamento no puede especificar las causas de que los parques eólicos no se encuentren en funcionamiento, ya que son «responsabilidad del promotor», que «podrá haber puesto en conocimiento o no de la administración» sus razones para mantener las instalaciones sin uso.

Por provincias, 42 de estas instalaciones se encuentran ubicadas en Burgos, 38 en Palencia, 26 en Soria, 22 en León, 13 en Zamora, 8 en Valladolid, 6 en Avila y 5 en Salamanca, según el anexo aportado por Economía y Empleo.

El secretario general de la Asociación de Promotores de Energía Eólica de Castilla y León, Agustín García Tejerina, explicó que la imposibilidad técnica de conectar el parque eólico a las grandes redes de distribución de la electricidad es «la razón más relevante» para no poner en funcionamiento las instalaciones, aunque el propietario tenga la autorización administrativa pertinente.

En concreto, se ha referido a la «trascendental» construcción por parte de Red Eléctrica Española de la línea de alta tensión que unirá las localidades de Tordesillas y Galapagar (Madrid), ya que en su opinión es el principal motivo para que la mayoría de estos parques eólicos no estén ya en funcionamiento.