Encarnación Alonso Rodrigo nació en El Cubo del Vino, donde ha vuelto a fijar su residencia tras pasar la mayor parte de su vida en Bilbao. Ha escrito un libro titulado "Enterraron bajo el agua el sol de nuestras vidas", con el que rinde homenaje a sus padres y recuerda los orígenes de sus abuelos, que nacieron en San Pedro de la Nave y tras verse obligados a abandonarlo al quedar sumergido bajo las aguas del embalse del Esla lograron formarse un porvenir en El Cubo del Vino.

-¿Qué motivos le animaron a lanzarse a la aventura de escribir este libro?

- Quería contar la historia de mi familia porque creo que es digna de ser contada. Son vivencias y recuerdos que no podían quedar en el olvido para que las generaciones que vienen detrás puedan saber cómo se vivía antes. Pero ante todo es un libro muy sentimental que pretende ser un homenaje a mis padres. Mi padre falleció hace dos años y mi madre hace uno y fue precisamente cuidando de mi madre en el hospital durante los últimos días cuando pensé en escribir este libro. Siempre me ha gustado escribir y he cumplido el sueño de escribir un libro.

- ¿Cómo y dónde comienza la historia de su familia?

- Mi madre nació en San Pedro de la Nave, que desapareció tras ser sumergido por las aguas del embalse del Esla. Tras verse obligada a salir del pueblo, la familia primero se instala en Andavías temporalmente pero finalmente se trasladaron al Cubo del Vino. Una de las cosas que cuento en el libro es que mi abuelo, que hacia el año 1915 se había casado en primeras nupcias, se quedó viudo y al cargo de una niña pequeña. La costumbre que existía entonces era que si moría la esposa y ésta tenía hermanas casaderas su obligación era que alguna de ellas debía casarse con el viudo, como así fue. El dolor que podían llegar a causar estos arreglos matrimoniales era tremendo, pues no se tenía en cuenta para nada la voluntad de la mujer, que siempre quedaba anulada totalmente por una sociedad machista y autoritaria.

- ¿Y qué pasó tras ese matrimonio pactado?

- Mi abuela tuvo que dejar atrás sus ilusiones y proyectos de vida junto al hombre que durante años había sido su novio, que resultaba ser hermano de quien sería su marido. Tanto dolor sintió el novio dejado que decidió huir lejos. Una mañana al amanecer tomó un barco y partió rumbo a Cuba. Pasó mucho tiempo sin que se supiera su paradero. Pasados unos años, llegó una carta a la familia en la que decía que residía en Cuba y que algún día volvería. Para entonces ya todos le llamaban el cubano y hasta el fin de sus días se le conoció como nuestro tío el cubano. Los abuelos formaron una gran familia de once hijos, cinco varones y seis hembras.

- ¿Cómo ha sido el proceso para recopilar todas las vivencias y recuerdos recogidos en este libro?

- Sobre todo, me he basado en todas las vivencias que me contaban mi madre y mi abuela, pero también me he documentado. También cuento anécdotas y bromas, como las que se compartían en un sitio que se conocía como el badén, que era una especie de punto de encuentro que había cerca de la farmacia donde se reunían los jóvenes para pasar el rato y para gastar bromas que a veces resultaban ser muy pesadas.

- ¿ Qué otras anécdotas se va a encontrar el lector a lo largo de las páginas de esta publicación?

-También cuento los años de la escuela, que por entonces eran muy duros porque no había ni baños ni calefacción. Sin olvidar el oficio de mi abuela, que era barquera y ayudaba a la gente a cruzar de una orilla a otra del río Esla, mientras que mi abuelo tenía un molino, por lo que toda su vida giraba en torno al río hasta que los obligaron a dejar el pueblo.

- ¿Ha sido complicado llegar a publicar el libro por su cuenta?

- La verdad es que no. Contacté con Uno Editorial, que es de Albacete, por Internet y me han ayudado mucho. En mes y medio ya estaba el libro a la venta y ya estoy a punto de sacar la segunda edición.

-¿Ha tenido mejor respuesta de la que pensaba en un principio?

- Mucha más respuesta de la que pensaba. A los vecinos y las amistades les está gustando mucho y se sorprenden con las historias que pueden leer en el libro. A mi familia, a todos mis primos, les ha gustado mucho. Lo estoy distribuyendo yo y ya he vendido más de cien ejemplares.

-¿Cómo se puede adquirir su libro?

Pues en la propia página web de la editorial se pueden encontrar mis datos de contacto para poder conseguir el libro. Estoy haciendo fotos de toda la gente que lo está comprando para después hacer un collage de recuerdo. Dentro del libro también he publicado fotos de los restos de San Pedro de la Nave que han quedado al descubierto cuando ha bajado el nivel del embalse.

- ¿Esta obra es su primera incursión literaria?

- Sí, había participado en algún certamen literario y había obtenido alguna mención, pero este es el primer libro que escribo.