La población infantil, ese bien tan preciado en un mundo rural envejecido y castigado por la despoblación, se multiplica con la llegada del verano en muchos pueblos de la provincia de Zamora, ya que son muchas las familias, normalmente de emigrantes zamoranos, que pasan una parte de la época estival en los pueblos.

Por ese motivo, el Grupo Socialista en la Diputación de Zamora propuso que la institución provincial ponga en marcha un programa específico para permitir a los ayuntamientos que lo soliciten contar con una financiación adicional para desarrollar actividades culturales dirigidas a los niños y jóvenes durante el próximo verano, tales como campamentos de día, talleres, semanas culturales, juegos tradicionales o ciclos de cine, entre muchas otras ideas que cada Gobierno municipal podría elegir libremente para sus pueblos.

En realidad ya son muchos los ayuntamientos que organizan actividades de este tipo, a veces con ayuda de la Diputación pero en muchas ocasiones pagando a los monitores y otros costes con fondos propios, lo cual "supone un importante esfuerzo económico para las arcas municipales", a juicio del Grupo Socialista, y en muchas ocasiones conlleva que los consistorios solo se puedan permitir ofrecer estas actividades durante un número de días muy reducido, mientras que las vacaciones escolares de verano duran casi tres meses.

Este esfuerzo de los ayuntamientos es, para los diputados socialistas, "fundamental" porque ofrece a las familias "una alternativa que les permite dejar a sus hijos durante su horario laboral en el propio municipio, sin necesidad de llevarlos a otros pueblos cercanos de mayor tamaño y con más posibilidades o incluso a la capital". Por eso creen que la institución provincial debe apoyar económicamente a los ayuntamientos que se deciden a organizar este tipo de actividades para los más pequeños. Fomentar esta clase de iniciativas y reforzarlas en aquellos pueblos donde ya existen supondría, a decir del Grupo Socialista en la Diputación, prestar un servicio "a muchas familias que encuentran múltiples dificultades de conciliación durante las vacaciones escolares" y que "en muchas ocasiones tienen que acudir a la ayuda de la propia familia, o incluso hacer un notable esfuerzo económico para contratar a cuidadores".

A juicio del portavoz socialista en la Diputación, Antonio Plaza, este apoyo a los municipios implicaría "no sólo añadir valor a nuestro medio rural con nuevos servicios, también la promoción y divulgación de nuestra cultura y tradiciones, además de la creación de empleo y, por tanto, la dinamización económica y revitalización social de nuestros pueblos".