Ferreras de Arriba cambió ayer su fisonomía urbana para dar paso a un desfile de caballos, dentro de la I concentración de Caballistas y coches de tiro, acompañada de las actividades de la I Feria de Abril celebradas en el municipio. Desde primera hora de la mañana, jinetes y monturas empezaron a llegar al recinto de la plaza, en medio de la expectación de los vecinos sorprendidos por la estampa andaluza en la Sierra de la Culebra. Trajes de sevillanas, peinetas y claveles adornaron el atuendo de las participantes, algún traje corto para ellos. Los establecimientos promotores de esta idea adaptaron sus menús y tapas al evento, y desde la paella al rebujito se incorporación a las ofertas de degustación.

La imagen más llamativa fue la presencia de los coches tirados por caballos que ocuparon la céntrica calle, para iniciar el recorrido pasadas las once de la mañana.

Cientos de personas disfrutaron de la presencia de la feria y de la espectacularidad de las monturas. Ni las previsiones del tiempo ni los refranes de abril acertaron con la llegada del agua y el espectáculo lució sin contratiempos.