Cuando Mami Kato pisó por primera vez los Arribes del Duero sayagueses, hace dos años, descubrió un espacio "maravilloso". Para una artista que bebe sus fuentes de la naturaleza, el agreste territorio del oeste zamorano se adivinaba como un espléndido marco de inspiración. El magnetismo se impregnó de tal manera en la piel de la artista japonesa que dos años más tarde ha vuelto para crear en Sayago, para traspasar los límites de la tierra -con su técnica de Earth Pot- y explorar la roca como molde de sus nuevas obras de arte. Un método ya bautizado como Rock Mould, que utiliza como base las cazoletas surgidas de explotación minera romana en los Arribes zamoranos.

Dos mil años de historia contemplan a este vestigio arqueológico, inspirador de artistas del barro que encuentran en las estructuras graníticas empleadas para el molido del mineral aurífero una base perfecta para conformar las piezas de cerámica.

Todo nace en un hacendoso taller de Gamones de Sayago donde la ceramista, Numa, ha conectado con la japonesa Mami Kato hasta germinar una idea, "cuya semilla llevaba veinte siglos esperando cerca del Duero". En Gamones se ha consolidado el encuentro de Oriente y Occidente, un proyecto común basado en la respetuosa inspiración en la naturaleza que seduce a las dos artistas.

Y a esa cita acuden esta semana un grupo de ceramistas, atraídos por esta innovadora experiencia nacida en la tierra y la piedra. Alumnos de México, Dinamarca, Singapur, Mallorca, Asturias, Barcelona, Teruel, Murcia o Madrid participan en el curso con Nuria Martín (Numa) y Mami Kato. La segunda experiencia conjunta de ambas artistas en un proyecto al que "hace diferente la ubicación en los Arribes del Duero. Esto es un atractivo para los alumnos interesados en la filosofía japonesa en un espacio que inspira muchísimo" explica Numa. Ella misma, una madrileña establecida en Gamones hace 11 años juntos a su familia, ha experimentado la evolución de su técnica artística hacia una filosofía más oriental, de contacto con una naturaleza que en Sayago se muestra "generosa" en sus múltiples formas.

"Aquí aprovechas todos los recursos naturales; en mis paseos diarios veo unas posibilidades increíbles de colores y texturas, formas que me está aportando la naturaleza. Veo también unas formaciones de cuarzo que añado a la materia y me inspiran muchísimo porque son súper energéticas" cuenta Nuria Martín.

Esa misma atracción ha encontrado Mami Kato en el territorio de Arribes, muy especialmente en las singulares cazoletas que pueblan el yacimiento minero. Allí, sobre un paraje arqueológico de Villardiegua de la Ribera, la artista japonesa impartió una clase inédita y la experiencia innovadora de realización de piezas tomando como base las estructuras sobre las que antaño se molía el mineral. "Trabajar sobre estas rocas es algo muy especial" confiesa la ceramista nipona totalmente encandilada con un paraje para ella sorprendente y muy distinto de su territorio oriental.

En su experiencia como maestra ceramista por distintas partes del mundo, Mami Kato nunca se había encontrado ante un paisaje tan sorprendente y peculiar como el yacimiento minero de los Arribes, donde por primera vez ha podido crear piezas y a la vez abrir un campo "extraordinario" para los creadores. "Es un lugar espectacular, cuídenlo por favor" concede una alumna llegada de Murcia, una de las que han repetido en los cursos del taller de Gamones.

Ella, como sus compañeros, como Mami Kato, como Numa. Todo han elaborado su propia pieza, tras pasar por las distintas fases de preparación del barro, uso del molde, extracción de las piezas, secado, decoración y cocción.

Cada creación dará vida a la exposición en el Museo Etnográfico de Zamora, que se inaugura el sábado. Será el colofón de este proyecto artístico inspirado en Sayago, su naturaleza y su historia.