La proliferación de la fauna salvaje en los montes de la provincia sigue siendo la causa de varios accidentes de tráfico diarios, y el área de la Reserva de Caza de la Sierra de la Culebra es una de las zonas en las que son más frecuentes. En la noche del jueves se producía un nuevo accidente en la carretera N-631, esta vez a la altura del cruce de Ferreras de Arriba. Un conductor que circulaba por ese punto a las once de la noche fue sorprendido por una cierva que se adentró en la calzada, y colisionó contra ella. En esta ocasión no hubo ninguna persona herida -sí que murió el animal como consecuencia del impacto- pero el siniestro ha provocado graves daños materiales en el vehículo, con el consecuente gasto de reparación para su dueño.

La siniestralidad provocada por la fauna suele pasar desapercibida debido a que en muchos casos los accidentes se saldan sin heridos gracias a la precaución de los conductores, que ya circulan más despacio de lo normal por las carreteras más conflictivas, como son la citada nacional 631 o la N-525.

Por otro lado, ayer por la mañana se vivían complicaciones en la circulación por la carretera N-122 a la altura de Sejas de Aliste, por la presencia en la calzada de un camión de matrícula portuguesa que volcó. El transportista no resultó herido.