Los pueblos de la Tierra del Vino se adelantaron al traslado del Nazareno de Sanfrontis y llevaron a las calles del casco antiguo de la capital los sones propios de la Semana Santa que sorprendían a los zamoranos que ayer por la tarde paseaban por la Rúa. Esos sonidos semanasanteros corrían a cargo de la banda de cornetas y tambores Jesús Nazareno de Villaralbo y de la banda del Santísimo Cristo de Morales del Vino, que animaron la peregrinación hasta la catedral de Zamora en la que participaron unos doscientos feligreses de las 32 parroquias del Arciprestazgo y cofrades de las distintas hermandades de penitencia de la zona.

La banda de Villaralbo precedía a la comitiva que abría una cruz guía y que entró en la ciudad por el barrio de Cabañales para cruzar el puente de piedra, subir por la cuesta del Pizarro y caminar hasta la Seo a buen ritmo, pues durante todo el trayecto una fina lluvia iba poco a poco mojando a los devotos. Cerraban los músicos moralinos, que se turnaban con los primeros para ir tocando de forma alternativa distintas marchas procesionales.

Las últimas notas del desfile sonaron en el atrio de la catedral, donde cada agrupación tocó un tema mientras la mayoría de las peregrinos se refugiaban de la lluvia bajo el portal para disfrutar del pequeño concierto semanasantero. Una vez dentro del templo diocesano los devotos fueron ocupando los bancos del altar mayor mientras algunos aprovechaban unos minutos para visitar las distintas capillas o rezar ante la Virgen de la Esperanza.

La misa cooficiada por varios párrocos de la comarca contó con una gran afluencia, pues a todos los peregrinos que recorrieron a pie los últimos kilómetros del camino se unieron muchos otros que optaron por acudir directamente a la Seo debido al tiempo desapacible que no invitaba al paseo.

Los fieles de la Tierra del Vino vivían así juntos la preparación espiritual que exige la Cuaresma para celebrar la pasión, muerte y resurrección de Cristo.

Este acto penitencial ya se está convirtiendo en una cita habitual de la Cuaresma para las parroquias de la Tierra del Vino, que en 2016 además realizaron otra peregrinación extraordinaria, en el mes de septiembre, para ganar el jubileo del Año de la Misericordia.

En cuanto a las bandas de cornetas y tambores de Villaralbo y Morales, volverán a coincidir esta semana, el sábado 17 de marzo, en el certamen que organiza Jesús Nazareno de Villaralbo en la Plaza Mayor de esta localidad a partir de las cinco de la tarde, "Clave de Pasión", que también contará con la participación de bandas toresanas, benaventanas, salmantinas y vallisoletanas.