La decisión irrevocable de renunciar de manera voluntaria a la gestión y mantenimiento del Museo del Traje Carbajalino por parte de la entidad sin ánimo de lucro presidida por Alberto Marbán Garrido el día 19 de octubre de 2016, se justificaba entonces por "las condiciones en las que nos encontramos en estos momentos, con una total falta de apoyo a todos los niveles, así como los últimos proyectos que desde el propio Ayuntamiento se han intentado sacar adelante sin contar en ningún caso con nuestra colaboración, ni siquiera con nuestra opinión, hacen que sintamos infravaloradas nuestra labor y funciones y que resulte imposible seguir trabajando en la línea que lo veníamos haciendo". La renuncia se había acordado en junta directiva por la mayoría de los socios el 2 de enero de 2016 en dicho museo.
En la misma misiva la asociación "Amigos del Bordado Carbajalino" informaba de "nuestra intención de cambio de sede legal, por lo que solicitamos la cesión de un nuevo espacio público, fuera del Taller de Bordados, en el que poder llevar a cabo nuestras actividades". Al parecer la entidad nunca recibió contestación a dicha petición.
Desde la Junta Directiva de Amigos del Traje Carbajalino se hacía público un comunicado el pasado lunes donde se afirma que "a fecha actual estamos esperando contestación al cambio de sede que pedimos en su día y, cómo no, estamos esperando a una comunicación para poder sacar del taller de bordados las cosas que son de nuestra propiedad" e inciden en que "la decisión de renunciar al museo fue por la falta total de comunicación con el Ayuntamiento, ya que tras varias peticiones se nos ignoro por completo"
