En el ejercicio del cargo, cuando no sabía cómo resolver algún problema, Mayte Romero cogía el teléfono de su casa, ya que en el Ayuntamiento no había, y llamaba al secretario del Gobierno Civil de Zamora, Porfirio Nafría. El secretario tenía una casa en Puebla y a menudo pasaba por la tienda que regentaba la familia. Había cierto trato y confianza para consultar los problemas de administración municipal que se le presentaban en sus inicios. Salía de los atolladeros pero también era empujada desde el Gobierno Civil a tratar de resolver otros "embolados", como la supresión del Ayuntamiento de Terroso y San Martín y su anexión a Cobreros, que llevaba años paralizado. Obligada, en cierto modo, por Porfirio Nafría, fue con otros cargos a San Martín y Terroso a desbloquear la integración a otro ayuntamiento. El último "embolado" en el Ayuntamiento de Lantadilla (Palencia) ha llegado a la Audiencia Nacional, que ha fallado anulando el expediente sancionador contra la funcionaria. Suma cinco sentencia a su favor, pero echa de menos el amparo del Ministerio de Hacienda y Función Pública.

- ¿Cuándo comenzaron los problemas en la Corporación de Lantadilla?

-Empiezan con la toma de posesión de la alcaldesa en 2008, que es elegida porque dimite, por las presiones existentes, el alcalde que había entonces, y que había ganado las elecciones de 2007, al principio de la legislatura. El alcalde, que era un independiente, tira la toalla. Dice que ya no puede más. Entra ella en coalición con el PSOE, aunque la mayoría la tenían los independientes, que eran los antiguos populares. Esta señora venía atropellando a todo el mundo, le costó mucho tiempo y muchas intrigas llegar hasta la Alcaldía, (empezando por hostigar incluso a los políticos locales con más respaldo popular que la precedieron).

- ¿Por qué se producen los encontronazos con la alcaldesa?

-En su trato esta señora conmigo ha sido siempre displicente. Yo procuro ser amable con todo el mundo pero cuando tienes que decir, en mi profesión, que esto es así, lo digo. No me queda más remedio. Haciendo memoria, el primer encontronazo fue en un pleno en el que ella intervenía como concejala, en 2001, se aprueba un escudo municipal que no es el que una parte de la población reconoce como suyo. Había un grupo de personas que habían hecho un escudo muy bonito que nos gustaba a todos, pero cuando fuimos a la Junta de Castilla y León a pasar los controles legales, el cronista de Armas dice que no guarda las normas de la heráldica. Todo eso tiene un reglamento.

-¿Y qué ocurrió?

-Se manda a un historiador que estudie el pueblo y nos diga qué escudo es el que se puede aprobar. En aquella zona se desarrolló la batalla de Llantada, en 1068, entre Castilla y León. El pueblo antiguo, dicen, que se llamaba Llantada y que de ahí viene Lantadilla. En el pleno se aprueba el escudo actual con el voto favorable de todos. Pero un grupo de personas, con el cura de entonces a la cabeza, dicen que ese escudo no vale porque ellos lo dicen.

-¿Y cómo acabó la cuestión?

- Se hace un libro explicativo y en él va una certificación de la secretaria diciendo que en el pleno se aprobó este escudo por unanimidad, y llega la primera tergiversación oficial, porque salen diciendo que ellos no votaron ese escudo, lo que evidentemente era falso.

- ¿Detrás hay un tema político o personal?

-Cuando entra de alcaldesa me pregunta cuál va a ser mi actitud. Respondo que la misma de siempre, yo soy la secretaria del Ayuntamiento. Habían dicho en las elecciones que a todos los que habían estado con los alcaldes anteriores, nos iban a tirar por el balcón. El alcalde anterior había sido del PP, le hicieron la vida imposible y se tuvo que marchar del partido, pero ganaba las elecciones. Esta señora quería ser alcaldesa como fuera. Es un tema de trepa personal.

- La alcaldesa le acusa de no cumplir sus funciones que es por lo que se le denuncia. ¿Usted cumple sus funciones?

-Yo cumplía mis funciones y más. Un secretario que está solo en un pueblo hace cosas que no le corresponden, pero lo que no puedo es hacer cosas ilegales o cubrir presuntas ilegalidades que ella ha hecho.

- Usted aporta al juez documentación de supuestas irregularidades.

-Están en el expediente. ¿Por qué están moviendo esto ahora, con todo el revuelo mediático posible? Porque la sentencia no es firme, han apelado a la Audiencia Nacional, y pretenden coaccionar al juez, como lo hicieron con el Ministerio para que me abriera el expediente, que acabó anulando la Audiencia.

- ¿Pero qué irregularidades aparecen?

-La primera nos llega a través de la Junta de Castilla y León. Hay una situación irregular de la que nos avisa la propia Junta y en la que interviene el Seprona. Hubo un acopio ilegal de madera en una finca municipal. Viene la pareja de Seprona a pedirme al Ayuntamiento la documentación del acopio. No es que buscaran un acopio ilegal sino que estaban siguiendo el transporte de madera por una plaga. Trataban de localizar el origen de la epidemia y evitar que se extendiera. Pero ¿de qué me hablan? No sé de qué me están hablando, les dije. Bajo con el alguacil y me encuentro el acopio inmenso a la orilla del río, en una finca municipal. Imagínate todo lo que se ve desde el Castillo de Puebla, desde el puente de la autovía hasta la presa del río, con montañas de madera. Después me entero que llevan meses pasando los camiones. Los camiones no pasan por la puerta del Ayuntamiento, que está en el centro del pueblo, yo no los veo.

- ¿Esa madera era de ahí o se traía de fuera?

-Se traía de otro sitio. Parte la movía el camión del marido de la alcaldesa, según me dijeron. Cuando bajo al río, con quien me encuentro es con el hijo de la alcaldesa en una pala apiladora, que se enfrenta conmigo y me dice que qué hago yo allí. La Junta le pide al Ayuntamiento que abra un expediente a una empresa concreta. La alcaldesa y los concejales, en Pleno, acordaron varias veces que no se abría el expediente, no obstante la secretaria advierte, en acta, que la Junta está diciendo que sí hay que abrir un expediente. Con la leña allí puesta quieren arreglarlo y una empresa manda un plano de ubicación de la finca para el acopio. Y en un Pleno, que se hace con mucha prisa, se aprueba un pliego de condiciones, para contratar el arriendo de la finca, y la secretaria pregunta ¿dónde está el pliego de condiciones del Ayuntamiento? No había, y así lo hice constar en el acta. Luego resultó que no se podía hacer el acopio en aquel lugar, porque llega un informe de la Confederación Hidrográfica, que remata todo, diciendo que la finca es inundable.

-¿Pero por qué lo que se ha publicado no le favorece?

- Las noticias que han salido en los medios son tan calumniosas y repetitivas porque todos dicen lo mismo, y sin prueba alguna, ni contrastación de la noticia que empezó el "circo". Van diciendo cosas que no son verdad, un disparate?

- Se la acusa de no expedir certificados.

-Ahora que todo está informatizado, si estás en el padrón o estás en el histórico, tecleas y la máquina te saca el papel. No hacemos los certificados a mano como antes. Pero un certificado necesita dos firmas, la tuya como secretaria que certifica y la de la alcaldesa, dando el visto bueno. Si la alcaldesa no aparece por el Ayuntamiento en 15 días? yo no le puedo entregar a un vecino un documento que no está firmado. Eso lo sabe ella y los demás. Pero hace tal presión a la gente que mucha está amedrentada, aunque a mí me manifiestan su apoyo en privado.

- ¿Si la secretaria no pasa por el aro se inicia la campaña de denuncias?

-Es cuando se inicia todo. Manifestaciones, pancartas, recogida de firmas pero sin que se entere la secretaria dicen, y lo ponen en Internet. De locos. Han pedido que yo dimita ¡Si no puedo dimitir, no soy un cargo político. Si me voy es abandono de servicio, de mi puesto de trabajo, y ¡eso no lo voy a hacer! Van a Madrid, a principios del 2015, con las firmas para hacer presión. El Ministerio me suspende provisionalmente por seis meses e inicia el expediente disciplinario. ¿Sabes cómo me notifica el Ministerio?, de forma poco elegante, Se presenta la alcaldesa con un sobre a mi nombre y sin dirección. Me dice ábrelo, y le contesto que ya lo abriré.

-¿Y qué sucedió?

-Como no lo abría saca el oficio del Ministerio, y en el que le advierten de la confidencialidad del acto, que por supuesto no cumple; con la copia del documento, a mi nombre, y que había que devolver al Ministerio, se queda la alcaldesa, y no aparece en el expediente, como no aparece tampoco la denuncia que se indica que ella puso contra mí, a finales del 2014, y que es el origen del expediente disciplinario. La alcaldesa recibía la correspondencia en su casa y retenía documentos importantes, (y eso a pesar de habérselo advertido varias veces, de palabra, y por escrito), de lo que yo me enteraba cuando me llamaban reclamándome el trámite correspondiente, ¡Hasta con documentos de la Junta Electoral que venían expresamente a mi nombre!

-¿Y la echan del puesto de trabajo?

-Lo grave es que te echan de tu puesto de trabajo, que es donde está la justificación de todo lo que has hecho, y te dejan indefensa, es muy importante destacarlo, para que los legisladores, la Administración y los Tribunales lo tengan en cuenta, están conculcando tu derecho constitucional a una legítima defensa.

-¿ Cuál ha sido el momento más crítico profesional y personal?

-Cuando se terminó el primer expediente sancionador que me abrió la Junta de Castilla y León, (y que perdió, en primera instancia y en apelación, con la condena en costas), y poco tiempo después, de rebote, te encuentras con otro que no sabes de dónde viene. En el expediente que me abrió la Junta de Castilla y León busco un abogado en Palencia, vamos a la Junta a verlo, y no hay ningún documento en el expediente. Me dicen que no hay nada porque era el inicio, solo el documento por el que notifican la apertura el expediente. De repente el expediente comienza a crecer. Yo, si tú no me gustas, digo que me hiciste esto o aquello. La mayor parte de las cosas estaban sin sello de registro del Ayuntamiento. Si haces una reclamación lo normal es que tengan un número de registro de entrada. Tú puedes pedirle al Ayuntamiento que te baje la luna, pero en ningún ayuntamiento te podemos dar el certificado de salud. Te puedo dar un certificado de nacimiento o de empadronamiento, si estás inscrito, pero no pidas cosas que no te podemos dar.

- Con el expediente sancionador?

-Con el primero vamos a juicio por todas las irregularidades del expediente, que nunca subsanaron. La Junta había nombrado una instructora y una secretaria. La secretaria no cumple las condiciones, porque la ley dice que la tramitación la tiene que hacer al menos un igual, que tenga las mismas condiciones profesionales que tu, y yo soy Habilitada Nacional, ella era sólo una administrativa. Seguimos adelante, pero advertimos las irregularidades sin que se tuvieran en cuenta. Entonces no hubo suspensión cautelar. A todas las cosas que decían les fuimos dando una explicación y su porqué, y justificándolas documentalmente. Si tengo un defecto es que lo guardo todo. Había hasta una sentencia del Contencioso-Administrativo que había ganado el Ayuntamiento a un amigo de la señora alcaldesa, de un tema ganadero. Cuando llega la alcaldesa le toca aplicar esa sentencia.

-¿Y qué pasó con la sentencia?

-La sentencia siguió sin aplicarse al menos hasta mi suspensión cautelar. Si eres amigo mío, (de la alcaldesa), te trato bien. Si no eres amigo te pego cuatro voces. Y tuve que llamarle la atención a la alcaldesa porque me daba voces. Haz lo que tengas que hacer pero no me chilles, le dije. El Juzgado Contencioso-Administrativo de Palencia primero, y Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León de Valladolid después, fallaron en contra de la Junta de Castilla y León, y con las costas a su cargo. Como no les gustó, a la alcaldesa y compañía, que ganara, empezaron a preparar un acoso y derribo, con ecos mediáticos e intimidatorios, para presionar al Ministerio y que me abriera el segundo expediente disciplinario, que es el que anuló en diciembre pasado la Audiencia Nacional de Madrid.

- No es la única secretaria o secretario que se enfrenta a estas situaciones de presión en los Ayuntamientos.

-No, Somos muchos los secretarios de Ayuntamiento que sufrimos presiones. El cuerpo de secretarios Habilitados Nacionales, secretarios profesionales, somos funcionarios independientes, no dependemos de ninguna corporación, precisamente para garantizar el desempeño de nuestras funciones, dependemos del Ministerio, que llegado el momento oportuno nos deja desprotegidos, y es quien nos adjudica el puesto de trabajo, aunque el que nos pague sea el Ayuntamiento, que es a quien tienes que controlar. Y el Ministerio, en plan político, si haces una queja, haces presión, la publicitas y haces una manifestación, al final toma partido contra el funcionario. Fíjate lo importante que soy que en el mes de enero, del 2015, hacen una manifestación en Palencia contra mí, y llevan sombreros de paja en plan de burla, porque la secretaria es una señora que lleva sombrero. ¡Mira que elegantes!

- ¿Ha denunciado esas presuntas irregularidades?

-He hecho varias denuncias, algunas incluso archivadas directamente en Fiscalía. Es ahora cuando se está empezando a reconocer las situaciones de presión que he estado sufriendo. Como ya dije, yo soy una funcionaria independiente. A mí me da igual que el alcalde sea de un partido o de otro, que sea blanco o negro, me tiene sin cuidado. Pero sí tengo que advertir si lo que se hace es legal o no, aunque la decisión política es de la corporación, que decide al final que es lo que se hace.

-¿Difícil trabajo el suyo, no?

-Los secretarios acabamos haciendo de administrativos pero no lo somos, nuestras obligaciones profesionales son las advertencias de legalidad, dar fe pública y los reparos de intervención porque que los gastos e incluso ingresos requieren de un trámite legal, y no de ocurrencias o caprichos particulares. Esas son mis obligaciones. Que después hacemos muchas más cosas ¡Claro que las hacemos! Por eso funcionan muchos ayuntamientos.

- Denuncia que es un acoso como trabajadora.

-Sí. Esto es como con el maltrato cuando te pegan, y en este maltrato lo que intentan es aislarte del mundo. Y tú te preguntas que qué he hecho para merecer esto. Con el tema de la(s) manifestación fui a la Policía Nacional. Cuando le estaba relatando al policía lo que me estaba pasando me dice que lo que estoy sufriendo es un acoso laboral. Pero yo no había sido consciente de ello. Una interventora, que también pasó por algo parecido, me recomendó unas pautas importantes. Me situó en mi plano y me aclaró que yo no era la culpable de lo que estaba sucediendo; ahora soy yo la que ayuda a los compañeros acosados que me llaman.

-¿También habrá tenido apoyos durante el proceso?

-Quiero agradecer el apoyo de muchos compañeros, de la Asociación contra el Acoso Laboral de Palencia, de la Policía Nacional, de la Guardia Civil, de los Profesionales Sanitarios que día a día han estado pendientes de mi salud durante este largo proceso, ¡viva la sanidad pública! hay que defenderla, porque es defendernos a nosotros mismos; y a tantas personas, públicas y privadas que me han acompañado con su presencia, su empuje, con su cariño y con sus consejos. Porque cuando hay maltrato, acoso laboral, violencia y demás situaciones que pretenden aniquilar a una persona, lo primero, después de reconocer que existe, es denunciarlo, hay medios y cauces para hacerlo. Y lo que se está intentando ocultar, con tanto ruido casposo y tanto acoso mediático, es que he ganado en los tribunales.