Moraleja del Vino tiene una plantilla fija de once empleados, siete de los cuales están contratados a tiempo parcial, según la plantilla que figura en los presupuestos municipales para este año. En la plantilla solo hay un funcionario, el secretario, mientras los otros once son personal laboral, todos ellos fijos. Tres de ellos están a jornada completa, que son un operario de servicios múltiples, un oficial de construcción y un peón de la construcción. Los siete contratados a tiempo parcial son el alguacil y auxilio de tareas de oficina, el peón de limpieza, los encargados del frontón y la biblioteca y tres técnicos especialistas en jardín de infancia.

Los gastos de personal se llevan 273.403 euros de un presupuesto global de 928.703 euros. Otros grandes capítulos de gastos son los que se destinan a bienes corrientes y servicios, que ascienden a 392.599 euros y las inversiones reales, que se llevan 203.500 euros. Otras partidas de gastos son los financieros, 1.200 euros y las transferencias corrientes, 58.000 euros.

El presupuesto se nutre sobre todo de los impuestos directos, que suman 343.000 euros, las tasas, que ascienden a 195.140 y las transferencias corrientes, 349.003 (dinero de otras administraciones que llega para el funcionamiento ordinario). Además hay ingresos patrimoniales, que suman 32.560 euros, impuestos indirectos, siete mil, y transferencias de capital, dos mil euros.