La Delegación del Gobierno en Castilla y León activaba ayer el nivel de preemergencia del protocolo de nevadas por la previsión de que volvieran a León, Palencia y a Zamora (Sanabria) a partir de la madrugada de hoy. Este nivel supone una intensificación en el control, vigilancia y despliegue de medios humanos y materiales. Se debe a la entrada de un frente por el noroeste que la Agencia Estatal de Meteorología ha calificado de nivel naranja, en una escala de amarillo, naranja, rojo y negro. La borrasca se junta con unas temperaturas muy frías, de hecho ayer la estación de Robleda marcó una temperatura mínima de -7,1 grados a las ocho de la mañana, una de las más bajas del día de España.

Ante la situación prevista, la DGT recomienda a todos los conductores planificar el viaje y consultar el estado de las carreteras. Tanto la A-52, entre Benavente y Orense, como la A-6 entre Benavente y Ponferrada están en la lista de vías de alta capacidad que pueden verse afectadas hoy por las nevadas. Otras vías de fuera de la provincia son la AP-66 entre León y Oviedo, la AP-71 de Astorga a León, la A-231 de León a Burgos, la A-67 de Palencia a Santander, la A-1 desde El Molar a Burgos y la autopista de peaje desde Burgos a Miranda de Ebro. Se prevé que las concentraciones moteras de Valladolid y Cantalejo motiven un incremento del tráfico en estas vías, y por lo tanto los problemas puedan ser aún mayores.

Al respecto, el director general de Tráfico ha dado instrucciones a la Guardia Civil de Tráfico para que en caso de nevadas no se reabran las autopistas de peaje concesionadas sin la supervisión del organismo estatal de tráfico. Además, continúa operativo el dispositivo especial de seguridad vial habilitado en San Rafael, Segovia, para controlar las autopistas de esa sierra.

La Delegación del Gobierno activa estas fases de alerta y preemergencia de acuerdo con el protocolo de actuaciones ante situaciones meteorológicas extremas, que regula las actuaciones de los organismos de la Administración General del Estado, con el objetivo de asegurar la vialidad en las carreteras de titularidad estatal y, en su caso, prestar la asistencia adecuada a los ocupantes de vehículos.

La campaña de vialidad invernal 2017-2018 en la Red de Carreteras del Estado en Castilla y León cuenta con un dispositivo material de más de 430 máquinas quitanieves y casi 3.000 personas: 962 de las demarcaciones de carreteras; 1.500 de la Guardia Civil de Tráfico; 16 del Centro de Gestión del Tráfico; 15 de coordinación de Protección Civil; 12 de la Aemet; 116 de los comités ejecutivos de Emergencias; y 300 de la Unidad Militar de Emergencias.