Los procesos de concentración parcelaria han sido en Aliste, Tábara y Alba una historia interminable que trae consigo que la mayoría de los propietarios (agricultores y ganaderos) que las promueven para desarrollar una agricultura y ganadería viable y sostenible, -mejorando su calidad de vida-, no la puedan disfrutar una vez conseguida: unos por haber llegado a la jubilación tras décadas de espera, y otros por haber fallecido: "Nos queda el consuelo de dejar todas las tierras juntas y que nuestros hijos y nietos por lo menos sepan donde se localizan".

La historia de Abejera es un claro ejemplo de ello. Dado el primer paso el 15 de febrero de 1993, el 26 de diciembre de 2005 la Dirección General de Desarrollo Rural aprobaba el estudio previo que fue obra del ingeniero agrónomo Andrés Jalón.

Se preveía que la cosa fuera para largo y lo fue: el 3 julio de 2008 la Comisión de Gobierno de la Junta presidida por Juan Vicente Herrera, la declaraba de utilidad pública y urgente ejecución. La preparación de planos y fichas de investigación de la propiedad y clasificación de los terrenos se inicio en enero de 2012. Las bases provisionales se aprobaron por la comisión local constituida el 4 de diciembre de 2013, terminando el plazo de alegaciones el 21 de enero de 2014. La superficie aportada asciende a 2.138 hectáreas, una vez excluidas 283 parcelas de bienes de Dominio Público, con 7,9 hectáreas. Descontadas la ocupación por caminos y desagües la superficie a atribuir suma 2.104,33 hectáreas de 339 propietarios. Abejera cuenta con 9 explotaciones de bovino (41 vacas), 9 de ovino (1.371 ovejas) y 35 de porcino (122 madres, 129 lechones y 6 verracos).