La Corporación Municipal de Vadillo de la Guareña ha acordado cambiar el nombre de la calle Queipo de Llano por calle Posada, después de que el senador Carles Mulet García requiriese al Ayuntamiento documentación en relación con los expedientes de alteración de la denominación de la vía, para comprobar si este municipio se ajustaba a la ley de memoria histórica.

El parlamentario de Compromís en la Cámara Alta se ha propuesto borrar los nombres de los próceres de la dictadura de todos los callejeros de España, y no es la primera vez que tiene que llamar la atención a un municipio zamorano.

Otro ayuntamiento que ha respondido recientemente al senador ha sido el de Bustillo del Oro, que recibió el requerimiento de Mulet el pasado 26 de junio, pero cuatro días antes el Pleno había aprobado el cambio de denominación de la calle Calvo Sotelo, la calle José Antonio, la calle General Sanjurjo y la calle Onésimo Redondo. Como en la mayoría de pueblos que se han ido adaptando a la ley, Bustillo ha recuperado los antiguos nombres tradicionales de sus calles. Así, la calle Calvo Sotelo pasa a ser la calle Real, la de José Antonio la calle La Laguna, la de Onésimo Redondo calle La Iglesia, y General Sanjurjo será calle La Rúa.