Una repentina granizada ha sorprendido a los conductores que transitaban por la autovía A-52, a su paso por la comarca sanabresa. El pedrisco ha provocado problemas de circulación e incluso ha obligado a parar a numerosos conductores, especialmente a la altura de Galende, aunque los problemas de visibilidad se han producido desde Puebla de Sanabria.

En las imágenes anexas se puede ver el tamaño de las piedras de granizo, que incluso han llegado a provocar desperfectos en algunos vehículos, según indican varios conductores afectados.