Integrantes del salmantino Club Clásicos Helmánticos realizaron el pasado domingo una "una estudiada y minuciosa salida sociocultural por tierras zamoranas" que fue acogida con expectación y entusiamo por las poblaciones que recorrió.

"Una decena de vehículos clásicos de distintas marcas, modelos, fabricados entre las décadas de los años 20 a los 70 y con un variado colorido, partieron a las diez de la mañana desde la ciudad charra para llegar a Molacillos, donde le esperaban otro participarte llegado desde Zamora con su flamante Seat 600E para acompañarlos en esta aventura por las Tierras del Pan. Gaiteros y damas vestidas con lujosos y antiguos trajes regionales esperaban la hora de misa mientras tanto la caravana de los antiguos coches partieron acompañados de Juan Manuel como guía, hacia las cisternas romanas, una interesante visita, aunque eso sí, un lamentable camino de tierra y piedras poco adecentado y en el que algunos de los clásicos rodantes pegaron en sus bajos" detallan los visitantes al informar sobre su cultural paseo.

A continuación visitaron Torres del Carrizal, tras el asombro de los asistentes ante las obras escultóricas en la calle, se dirigieron al Museo del reciente fallecido escultor autodidacta Mariano Fernández, quien donó sus obras a su pueblo natal.

En el Museo municipal Mariano Fernández estuvieron acompañados por el alcalde de la localidad e hijo y nieto del artista. Son obras sobre temas etnográficos y de oficios del campo"

Luego se desplazaron a San Cebrián de Castro, donde se sumaron otro Citroen 2 CV y una Furgoneta Citröen AK 400, proveniente de Zamora. La asociación cultural Castrotorafe, principal promotora de esta concentración, los recibió maravillosamente y les invitó a la comida para reponer fuerzas para continuar las visitas posteriores. El club Clásicos Helmanticos como muestra de agradecimiento hizo entrega a dicha asociación una placa impresa y un dorsal del evento, como recuerdo.

Sin dejarlos de la mano fueron los invitados acompañados por algunos de los miembros de la asociación cultural Castrotorafe a las visitas de la tarde, desplazándose hasta las ruinas de la antigua población de Castrorafe. Allí tuvieron de guía a Manolo, que le dio grandes explicaciones de esta antigua fortificación en todo su recorrido, centrándose más en el castillo y en su vistas paisajistas. Posteriormente visitaron El Monasterio de Moreruela, allí tuvieron de guía a Isabel, de la asociación cultural Santa María de Moreruela. Tras la visita se desplazaron a Granja de Moreruela, donde fueron invitados a unos refrescos por esta asociación.

Dieron por finalizada las visitas a las 20.30 horas en el Puente Quintos, sobre el río o Esla, y despidiéndose de los acompañantes muy agradecidos a la Asociación Castrotorafe. Tras recorrer 288 kilómetros en una completa jornada en la que se vieron sorprendidos del potencial turístico de interés cultural de esta zona y de la bondad de sus gentes, a las 10.30 horas llegaron a la ciudad Tormesina. Fuentes del Club Clásicos Helmánticos lamentan que la difusión de estos valores tenga que hacerlo "la iniciativa privada".