La Casa del Parque Convento de San Francisco, de Fermoselle, destaca por ofrecer a los turistas que cruzan sus puertas, cerradas buena parte del año, una visión general del espacio protegido Arribes del Duero. Además, gracias a la labor de sus monitoras contemplan múltiples y didácticas exposiciones, con especial entrada de artistas jóvenes, autodidactas y noveles que, en muchos casos, solo hallan impedimentos en los salones consagrados al arte.

De la aportación de este centro de interpretación del espacio protegido da fe el llamado Libro de Firmas donde, quienes lo tienen a bien, plasman sus impresiones con una frase, unas pocas palabras y, los más artísticos, un dibujo más o menos florido. Las sensaciones que les proporciona el territorio, la villa de Fermoselle y la propia Casa del Parque, y el trato recibido por el personal que atiende el centro, llenan de contenido el Libro de Firmas plantado, junto con el bolígrafo, sobre una mesa en la entrada, a la mano del visitante, que solo tiene que dar rienda suelta a su parecer y creatividad.

Es un libro elocuente a lo largo y ancho de sus hojas, y en cada rincón de sus páginas. Es la huella de quienes visitan Arribes y dejan con sus escritos una información a tener en cuenta. En sus caras dejan rastro fermosellanos que regresan a su tierra desde las ciudades o lares a donde el trabajo o el destino les llevó, pero muy en especial los verdaderos turistas que eligen este punto del país para conocer sus valores y que se llevan una vivencia o un recuerdo en el alma.

El trato dispensado por las monitoras es una alabanza común que convierte al centro de Fermoselle en un ejemplo de apertura, y divulgación que otros debieran emular.

"Tan cerca y tan bello" plasma un visitante salmantino al referirse a lo contemplado en Arribes del Duero. "Por la conservación de la zona. Buena tierra, buena gente y excelente el trabajo de equipo que ha hecho esta Casa". "La experiencia y el trato recibido ha sido formidable" escribe otro turista. "Me gustó mucho el recorrido. Era linda toda la fauna". "Me encanta fermoselle, pero los toros no". "Somos de Fermoselle y estamos en Asturias y este centro nos sorprende por sus magníficas exposiciones cada vez que venimos. Ánimo y adelante. Así se podrá dar vida a este pueblo". "Quiero ver lobos, zorras, osos y cabras montesas". "Ha merecido la pena venir a este pueblo y ver sus encantos". "Soy agricultor a muerte" deja escrito un tal Álvaro González para que todos lo sepan. "En Elche hace calor y sol, aquí hace frío. En Elche hay playa pero aquí hay un río precioso y un lugar como esta Casa. Maravilloso todo". Las lechugas portuguesas valen más que una hamburguesa" expresa un visitante, para quien piden nada menos que el Premio Cervantes. "Los Arribes son una pasada por donde lo mires". "La guía de esta casa es un amor. Su simpatía mola mucho y es muy, muy didáctica". "Es cierto que hay mucho potencial en este pueblo y ha sido un placer conocer el pueblo de mi padre y a su familia", deja escrito un llegado desde Bilbao. "Por la conservación de la zona"desde Robleda. "Una visita estupenda, nos encantó". "¡Fantástico todo. Muy bien atendidos! firman dos gallegos. "Es la clase más bonita y mejor explicada que conozco hasta el momento". "Sin vosotros no conoceríamos todos los secretos que encierran los Arribes". "¡Felicitaciones! Muy bien montado el Museo y el nivel es excelente" refleja un argentino. "Gracias por hacernos apreciar todo esto" rubrica un valenciano. "Este centro nos sorprende por sus exposiciones cada vez que venimos" indica un fermosellano residente en Asturias. "Ha merecido la pena venir a este pueblo y ver sus encantos" Euskalherria.

"Bonitos paisajes y mucha tranquilidad". "Da gusto ver cómo está todo de conservado, con mimo, respeto y profesionalidad". Una niña rompe la tónica y escribe: "gracias por todo, pero no me he enterado de nada".

También el jardín de la Casa del Parque de Fermoselle, un verdadero jardín botánico de Arribes, llama la atención de los turistas. "Me ha encantado, sobre todo el jardín. Lo explican muy bien y a los niños les hacen unas preguntas superdivertidas. Las aves disecadas molan".

A quien recurre al verso: "Jardín natural, edén románico de rocas tallas por agua protohistórica, salud de tierra fuerte, de sombra y tormenta, de jimbros y genjos que conectan con lo más profundo de esta tierra".

"La cabra salmantina tira al monte" deja escrito otro visitante. "Una muy bella visita" rubrica un visitante francés. "Guau ¡qué sitio tan chuli, mola todo, explicaciones, decoración, jardín, mapas!. "Nos hemos enamorado de este lugar. Buenas explicaciones y todo muy cuidado. Sois un ejemplo". "Siguiendo el camino del Duero. Imprescindible visita". "Es todo un lujo disfrutar de esta zona, el entorno y su comida es fantástica. Pero, además, esta casa, con su guía, es un broche ideal para un fin de semana increíble". "Que sigáis manteniéndolo así de bien" aconseja otro firmante. "Un centro diferente a muchos otros y muy buen trabajo".