El incendio declarado ayer a mediodía en los focos de Pino del Oro y Castro de Alcañices se encuentra "estabilizado, pero no controlado". Así lo ha reconocido este domingo el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez Quiñones, que ha visitado el Centro Avanzado de Mando en la zona para conocer de primera mano el estado del fuego.

Asimismo, en sus declaraciones, Suárez Quiñones ha reconocido que la situación "es más favorable que ayer", dado que el incendio está "sin llama". Eso sí, tiene "un gran peligro de reproducción porque se halla un perímetro muy grande, de unos 30 kilómetros, y hay muchos puntos calientes".

En cuanto a la superficie calcinada, aún es pronto para ofrecer datos definitivos, pero el consejero ha adelantado que, al menos, se han visto afectadas 2.500 hectáreas, 300 de ellas de encina.

Por otro lado, Suárez Quiñones ha confirmado que todo apunta a que el fuego es intencionado, ante los "indicios de criminalidad" que arroja su origen.