Moraleja del Vino clausuró ayer las fiestas patronales de La Magdalena con el tradicional encierro campero celebrado en el paraje de El Moro. Como es habitual, el popular festejo volvió a reunir a cientos de aficionados que se desplazaron hasta la localidad del alfoz en sus automóviles particulares en una calurosa jornada.

En torno a las diez de la mañana, los dos bóvidos de la ganadería de los Hermanos Bragado saltaron con bravura al concurrido prado en un encierro limpio que se saldó sin incidentes destacados.

No obstante, al menos dos caballos fueron empitonados por uno de los astados y otros equinos también tuvieron que ser atendidos por el veterinario debido a los habituales topetazos de los morlacos. Asimismo, el teniente de alcalde del Ayuntamiento de Morales del Vino, Daniel de Mena, resultó herido tras sufrir una caída y tuvo que ser trasladado al Complejo Hospitalario de Valladolid donde fue atendido por una fisura en la mandíbula. Al parecer, el joven jinete recibió un fuerte golpe en la cara a raíz de una coz del caballo que montaba después de tropezar en una cuneta del prado. Pasadas la una del mediodía, los camiones fueron devueltos al camión dando por finalizado el popular festejo que cada año congrega a un nutrido número de espectadores.

Ya en horario vespertino, la compañía artística Kicirke llenó de teatro, malabares y humor la Plaza Mayor con su espectáculo circense "Comediante".

Por último, los moralejanos se sentaron a la mesa para disfrutar de una agradable cena de convivencia de jamón asado y patata panadera antes de observar los fuegos artificiales y echar el último baile tras tres intensos días de fiesta. En este sentido, la alcaldesa de Moraleja, Eva María Calvo, afirmaba estar muy contenta con el desarrollo de las fiestas así como con la afluencia de público: "Las fiestas han ido muy bien, hacía muchos años que no veía la plaza así de llena, no entraba nadie más, yo creo que desde el concierto de Medina Azahara no había tanta gente", confesaba.

De forma paralela, la regidora municipal mostraba su preocupación por el estado de salud de De Mena al igual que su homólogo moralino, Miguel Ángel Piorno, quien confirmaba el percance sufrido por el teniente de alcalde: "Se encuentra bien pero le están realizando distintas pruebas como consecuencia del golpe propinado con uno de los cascos del caballo".