La Magdalena ha metido de lleno a los pueblos alistanos en la vorágine de las fiestas patronales que día tras día durante julio, agosto y septiembre convertirá a la comarca en una tierra llena de vida donde los abuelos, mayoría en cada localidad durante os meses de primavera, otoño e invierno, volverán a compartir calles y plazas, mañanas, tardes y noches con los niños y niñas regresados de las grandes ciudades al origen de sus padres.

El folclore popular se reafirma como el gran protagonista de los festejos y en Grisuela de Aliste fueron los integrantes de la agrupación "Manteos y Monteras" los encargados de poner la mejor música y bailes al ritmo de las gaitas, las dulzainas y los tamboriles en el prado, uniéndose los vecinos. El programa incluyó también misa, hinchables para los más pequeños y bailes nocturnos con Miramar y Darling.

En Rábano desde el día 17 al 21 se desarrollo un campamento de verano infantil. A lo largo del fin de semana las fiestas de María Magdalena fueron las protagonistas con una muestra de folclore a cargo de Aulas de Música de Aliste y Tras Os Montes de Trabazos, entidad que preside Miguel Bermúdez, que cautivo a los presentes con sus danzas, tonadas y trajes típicos. Exitosa fue también la sabrosa merienda popular en la plaza de la iglesia, lo mismo que los juegos infantiles con regalos para todos y los bailes con "La Charambita" de Aliste y la orquesta Buenavista.

En la localidad de Villarino Manzanas, en invierno con apenas 10 vecinos, los ahora 40 residentes, veneraron a su patrona con una santa misa y una comida de hermandad donde participo todo el pueblo. Con vistas al mes de agosto cuando hayan regresado todos los emigrados se celebrará otro día de fiesta donde también se contara con verbena popular.

En Sesnández de Tábara los vecinos honraron a La Magdalena con pasacalles, misa y verbena con el grupo "Nieva".