Luca, el niño que estuvo a punto de ahogarse en la piscina de Morales del Vino, continúa ingresado en el Hospital Virgen de la Concha de Zamora después de que el viernes por la tarde fuera trasladado al centro hospitalario para realizarle distintas pruebas a la búsqueda de las posibles causas que pudieron haberle afectado en su inmersión en el agua.

Según las informaciones recabadas por este diario, el niño se encuentra ingresado en la planta de pediatría en observación, donde se le han realizado distintas pruebas. "Está muy bien, pero suponemos que permanecerá en el Hospital un par de días", aseguran fuentes consultadas por este diario.

Por el momento no hay diagnóstico pero el chico se mantiene "sano y contento". Por su parte, la socorrista, S. B. A., continuaba ayer con su trabajo, desbordada todavía por el suceso sufrido durante la media tarde del viernes, cuando su intervención fue clave para sacar al joven de la piscina, haciéndole técnicas de primeros auxilios que consiguieron sacar agua de los pulmones del crío y conseguir que volviera a respirar.

Hasta la piscina de Morales del Vino se desplazó el viernes una ambulancia sanitaria del 112 y un helicóptero medicalizado desde Salamanca. Fue precisamente la médico que venía a bordo del helicóptero quien ordenó el ingreso en el centro hospitalario de Zamora, con el fin de hacerle un seguimiento con tal de descartar posibles patologías.

Responsables de la empresa "Primus Invictus" que gestionan la piscina municipal de Morales del Vino siguen muy de cerca la evolución del muchacho mientras el complejo deportivo recobra la normalidad después de que la llegada del helicóptero provocara mucha expectación y revuelo entre los bañistas que allí se encontraban durante la tarde de ayer. Afortunadamente, todo quedó en un susto en un día "para aprender un poco más y seguir trabajando", según señalan los gerentes. "El niño está evolucionando muy bien. Eso es lo único que debemos celebrar".