Fuentesaúco despidió ayer sus fiestas con un animado encierro urbano en la Plaza Mayor y las calles más céntricas de la villa al que también acudieron cientos de aficionados al toro de otras localidades zamoranas, salmantinas y vallisoletanas.

Los cuatro novillos de los Hermanos Boyano, de Villalpando, volvieron a sacar su bravura para proporcionar un perfecto fin de fiesta de La Visitación 2017. Durante más de una hora los astados dieron buen juego a quienes se atrevieron a atravesar las talanqueras para recortar o marcarse unos pases, y los animales tardaron en cansarse pese al calor propio de una tarde de julio que arreciaba sobre la capital de La Guareña. El festejo popular concluyó sin incidentes reseñables.

Concluían así unas fiestas que alcanzaron su momento álgido el pasado sábado, según destaca el alcalde, Gaspar Corrales. "Nunca la plaza de toros de Fuentesaúco había estado tan llena como en el concurso de cortes de este año, y por la noche Los Chunguitos también consiguieron llenar la Plaza Mayor en un ambiente muy sano". El regidor reconoce que "hay cosas que tenemos que mejorar, especialmente en la organización de los espantes en la pradera, pero ya estamos trabajando en ello de cara al año que viene".

Igualmente, muchos saucanos ya piensan hoy en la Mariseca del próximo año, cuando las fiestas de La Visitación y sus espantes ya parezcan más cerca en el tiempo.