En San Juan del Rebollar los niños visitaron la finca de recreo "El Cuevo & Protección de la Naturaleza", propiedad de Juan Manuel Manzanas, más conocido como "Tribuleiras". En ella están las siluetas de numerosos animales recortados en chapa, además existen diferentes nidos de pajarillos y cajas anideras fabricadas con distintos materiales, así como cuernos y cráneos de cérvidos, ovejas o un lago con carpines.

Agua y fuego fueron, son y siempre serán dos elementos imprescindibles para la vida de los pueblos alistanos y su actividad agroganadera. Bomberos y Agentes de Medio Ambiente entre juegos, teoría y práctica supieron trasmitir a los más pequeños, y ellos cogerlo a la primera, la importancia de las buenas practicas. El agua es un bien escaso y malgastarla puede ser una tragedia cuando la necesidad llegue, para el consumo humano o para apagar un incendio. El fuego es dinamita pura, mejor no tentar la suerte con lumbres o tirando cohetes y petardos en fiestas.