Cubos de basura a rebosar y excrementos humanos en los alrededores de los servicios públicos porque los edificios están cerrados. Esa es la lamentable imagen que dan las zonas de uso público del Parque Natural del Lago de Sanabria por el nulo mantenimiento de instalaciones e infraestructuras. Ayer finalmente la Consejería de Fomento y Medio Ambiente recogió la basura, la víspera de un fin de semana que se anuncia de máxima afluencia y con temperaturas de 34 grados. El Ayuntamiento de Galende trata de llegar a un acuerdo ante esta situación con la Junta, que es la administración que gestiona los espacios de uso público. Este junio se han adelantado la visitas a las playas por la ola de calor .

Los visitantes son los primeros afectados, cuentan trabajadores y empresarios de la zona, que al llegar a los estacionamientos de las dos playas la primera impresión del paisaje protegido son los contenedores repletos bolsas y con basura por el suelo. En Custa Llago los contenedores están a pocos metros de la senda para personas con minusvalías. En Viquiella el recibimiento es doble, por un lado en la parte central del aparcamiento y por otro en la bajada a la playa por el chiringuito. Los usuarios que descienden de los autobuses lo primero que buscan son los baños., en ambas playas están cerrados. En Custa Llago están situados junto a la senda habilitada. En Viquiella están los servicios y vestuarios del chiringuito, cuya apertura dependerá del nuevo adjudicatario de la explotación, pero hay un segundo edificio dependiente de la propia dirección del Parque Natural, cuya apertura y limpieza realiza el personal contratado o de mantenimiento de la Junta. La consecuencia directa de la incontinencia en estos casos es que se depone en las mismas instalaciones pero por fuera, ofreciendo otra imagen deplorable del paisaje.

Los segundos perjudicados son los trabajadores y empresarios de la zona que recogen, a veces de malos modos, las quejas de los visitantes. Otras veces contemplas escenas que dan lástima, como las personas que tienen movilidad reducida suben por la senda y al llegar arriba se encuentran que no pueden entrar al baño porque el edificio está cerrado. Esta situación se da desde Semana Santa, pero es en esta época cuando el cierre de las instalaciones deja en entredicho la gestión de los espacios de uso público del Parque Natural.

La limpieza de las playas no es la mejor de los últimos años, como constatan los bañistas. En la Playa de los Arenales también se acumula la basura, pero en este caso los servicios y vestuarios están abiertos, su mantenimiento depende de la explotación del establecimiento.