La sexta edición del Certamen de Folclore "Fini el Barrito" de Fuentesaúco tuvo un carácter muy castellanoleonés en el que participaron hasta seis grupos diferentes en el que la música y la danza combinaron diferentes estilos para hacer las delicias del numeroso público asistente.
En el teatro saucano se dieron cita diferentes estilos de la música folclórica de la región con fusiones sorprendentes de instrumentos tradicionales y modernos como la perfecta combinación de órgano eléctrico y dulzaina que ofreció el dúo La Charambita de Valladolid. Desde Segovia llegó otro dúo, Belmonte y Pleite que sorprendió al público con una variedad de instrumentos populares como un callado con cascabeles o los tradicionales mortero y botella de anís. También se atrevieron con la compleja combinación de guitarra y dulzaina en un amplio y variado repertorio.
El tercer grupo invitado y con el que se cerró el certamen ofreció la originalidad de su origen ligado a la Semana Santa de Valladolid y del instrumento estrella que es la gaita. Se trata de la Banda de Gaitas de la Muy Ilustre Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad de Valladolid. Si bien tocaron algunas de las marchas con los que desfilan en Semana Santa, también ofrecieron temas del repertorio popular que encandilaron al público, y como no, cerraron el acto con una soberbia muñeira que arrancó el baile de alguno de los asistentes.
Pero también en el certamen, y como viene siendo habitual, hubo un espacio para la música local. En primer lugar los propios organizadores, Dulzaineros de Fuentesaúco, que como es tradicional arrancaron con una divertida melodía típica de la Visitación. Continuó La Coral Saucano Guareña tirando de repertorio ya conocido, como los labradores o las golondrinas, y por último la Escuela de Folclore de la Guareña, con sede en Fuentesaúco, que en esta ocasión participó sólo con el grupo de percusión y baile llenando de colorido el escenario con sus trajes típicos locales.
El momento emotivo del evento se produjo cuando el Grupo Dulzaineros de Fuentesaúco llevó a cabo el acto de homenaje y reconocimiento que cada año pretende significa la aportación a la cultura musical de algún saucano o saucana. En esta ocasión el premio recayó en Fernando Juanes, un saucano músico autodidacta que con un edad ya avanzada se atrevió a aprender a tocar el saxo por su cuenta, que durante años acompañó las charangas de los quintos, que también hizo sus pinitos con la dulzaina y muy conocido en la villa por haber formado parte del grupo musical comarcal Pueblos Cercanos que tantas veladas han amenizado en fiestas populares diversas. Fernando "El Platero", como es conocido por su profesión de joyero y relojero, manifestó a todos los asistentes su agradecimiento por un homenaje que no se esperaba.
