El alistano río Cebal se ha convertido en el primero de la provincia de Zamora en dejar de correr y ello trae consigo la prohibición total e inmediata de la práctica de cualquier tipo de pesca en las aguas de sus pozos aislados, ya que estos deberán cumplir con su cauce como reserva ecológica para salvaguardar la fauna piscícola. La escasez precipitaciones llevó al Cebal a secarse en junio de 2016 y no volver a correr hasta febrero de 2017 gracias a las lluvias invernales.

Dicho río desde su nacimiento en Villarino Cebal hasta su desembocadura en el Aliste (Término de "El Poyal" en los límites geográficos de Valer, Flores y Fradellos) solo cuenta con un manantial permanente: la "Fuente Fidionda" de Grisuela también afectada por los calores y falta de lluvias en primavera. El pasado año al dejar de corre dejó atrapados fuera del agua a cientos de peces, muchos de los cuales murieron. Los ríos alistanos están bajo mínimos a causa de la fuerte sequía y solamente el Manzanas y el Frío mantienen un caudal aceptable dentro de la precaria situación que se vive. Otros como El Aliste, Castrón, Cabrón, Mena y Espinoso se prevé que dejen de correr a lo largo de este mes de junio ya que muchos de sus manantiales están prácticamente ya agotados.

Tanto los pescadores como los agricultores deben saber, así lo marca la normativa, que una vez que un río o arroyo deja de correr, automáticamente queda prohibida tanto la pesca de cualquier especie piscícola, ya sean cangrejos o peces, como el sacado de agua con motores para el riego de huertas o praderas. Pescar o regar en estos casos de reserva ecológica puede llevar a fuertes multas económicas.