El alcalde de Villalpando, Félix González Ares, niega que en el Ayuntamiento haya una situación de ingobernabilidad debido a las desavenencias surgidas entre los miembros del grupo de Gobierno local, tal y como expresaba el Grupo Municipal Socialista a través de este diario el pasado martes. En un comunicado que el regidor ha enviado a este diario, invita a los socialistas a "que indiquen algún caso concreto en que exista bloqueo o desgobierno, más allá del que se resolverá en el próximo pleno y que solo tiene que ver con la compra del ganado para las fiestas de San Roque", y les acusa de "tratar de confundir a los vecinos con este tipo de manifestaciones, eso no es otra cosa que demagogia barata. A mi juicio, cuando alguien no gana en las urnas ha de hacer una oposición constructiva para ganarse el respeto de los vecinos y no tratar de convertir el Consistorio en una especie de Sálvame".

En este sentido, González Ares lanza un mensaje a los vecinos: "Los villalpandinos pueden estar tranquilos, puesto que se están llevando a cabo todas las inversiones presupuestadas para el beneficio y disfrute de los vecinos. Estas inversiones, a pesar de estar limitadas por ley, serán las más elevadas desde que dirijo el Consistorio, merced a la labor realizada desde entonces. Es una lástima que tengamos que respetar la tasa de reposición de efectivos, ya que no podemos contratar el personal que nos gustaría para emprender nuevas actuaciones necesarias y agilizar otras en ejecución, con lo que se contribuiría a disminuir el paro en el municipio".

El regidor concluye su comunicado volviendo a achacar a la ignorancia las motivaciones de sus adversarios: "Hay personas a las que lamentablemente, y quiero creer que desde la ignorancia, les cuesta digerir la labor realizada en los diez años anteriores en los que el diálogo, colaboración, buen saber hacer y armonía reinantes han servido para sacar a flote la maltrecha economía municipal heredada, y contribuido a la agradable y pacífica convivencia entre los vecinos", para despedirse advirtiendo que "mi única misión en lo que queda de mandato es seguir trabajando por el bien de mi pueblo, alejado de intereses partidistas o personales. Mi aval, más allá de las palabras, es mi trayectoria".

Sin embargo, lo cierto es que las relaciones están rotas dentro del Grupo Popular y el alcalde solo cuenta con el apoyo de un concejal en una Corporación de nueve miembros. Preguntado por este diario sobre cómo piensa gobernar en minoría responde que sus compañeros "siguen siendo concejales y tendrán que pensar, igual que yo, en el bien de Villalpando, espero que no se dediquen a bloquear", aunque no descarta expulsarles de la Junta de Gobierno Local.

Respecto a los presupuestos de San Roque que el regidor se niega a firmar -según los ediles del PP- asegura que "nunca en diez años se me había traído a firmar un contrato sin previo conocimiento del alcalde, ¡qué casualidad que el único que se me trae así, para que lo firme directamente, es el de la compra de unas reses! " y aclara que "les di permiso para visitar ganaderías, no para cerrar contratos sin informarme previamente". En cuanto a las injerencias de personas ajenas a la Corporación en asuntos municipales aclara que "tengo la fea costumbre de asesorarme de gente que sabe de cada cosa, no solo en temas taurinos, y durante todos estos años eso ha contribuido en beneficio de las arcas municipales".

En cualquier caso, los contratos se conocerán y votarán en el pleno extraordinario que ya tiene fecha. Los concejales han recibido la convocatoria del secretario para el miércoles 14 de junio a las 12 horas.