El portavoz del Grupo Ahora Decide en el Ayuntamiento de Galende, José Rodríguez Ballesteros, ha solicitado facilitar el acceso a los residentes, tras la reforma de la Plaza España de Ribadelago, por las dificultades que se producen en estos momentos. La propuesta es sustituir los barrotes movibles por pivotes electrónicos y la entrega del mecanismo de activación a los residentes para que puedan acceder a sus viviendas, además de permitir el acceso de vehículos de emergencia, como ambulancias. La petición incluye instalar placas de prohibición de estacionar o vado para que queden libres de paso, además de señalización horizontal y vertical de paso de residentes. La reserva de la plaza de aparcamiento para minusválidos, como contempla el proyecto, y que quede libre el estacionamiento enfrentado al paso del cebra de la plaza, son las propuestas del grupo municipal.

El texto de la propuesta recoge que el acceso a la Plaza de Ribadelago, tras la reforma, está cancelado por tres barrotes anclados a una chapa de hierro atirantada al suelo. Uno de los barrotes se puede retirar, pero para ello hay que usar una maza para quitar el pasador, y es dificultoso. Los coches aparcan de manera generalizada delante de estos dos accesos, sin que exista señal de prohibición de aparcamiento, o vado permanente para que los accesos queden libres. En el interior de la Plaza existen viviendas donde residen familias que pueden precisar en el futuro acceder a sus viviendas con vehículo y no pueden hacerlo. "Si una ambulancia y otro servicio especial de análogas características tuviera que asistir a alguna de estas familias, y dada la edad que tienen lo necesitan, no podrían acceder hasta sus viviendas debido a la dificultad de los barrotes colocados en los dos accesos, y porque además obstruyendo el espacio de los dos accesos aparcan vehículos que lo impiden", señala el portavoz en su escrito.

Las medidas de cierre de la plaza no han sido autorizadas "en ninguno de los Plenos Municipales celebrados, ni existe Ordenanza o resolución legal prohibiendo a los vecinos de la Plaza acceder en vehículo a sus viviendas. Sin embargo, no siendo legal la medida, se les ha prohibido tal acceso por la vía de los hechos consumados; es decir, colocando los barrotes en los dos accesos y no instalando delante de los mismos señal de prohibición de aparcamiento" recoge el texto.

La intencionalidad de reformar la plaza decidida únicamente por el equipo del alcalde, con la que no ha estado de acuerdo Ahora Decide, era obtener un espacio diáfano para favorecer el incremento de turistas y la extensión de las terrazas de hostelería "tal como esto último se está viendo". Esta plaza "no es una finca privada, sino un espacio público de todos y para todos los vecinos". Para el grupo municipal no se puede impedir el acceso a los residentes con viviendas en la zona. En la memoria se establecían una limitación de acceso rodado pero no la prohibición de acceso a los residentes en la plaza. Esta prohibición llega "por la vía de los hechos y porque los accesos quedan obstruidos por los vehículos que aparcan".