El joven pescador Pedro Llamas Espíritu Santo recordará la fecha del sábado como un día especial porque consiguió capturar una trucha de 3,5 kilos de peso y con todas las trazas de un ejemplar puro. Un éxito al alcance de pocos, obtenido en el embalse de Puente Porto hasta donde decidió subir para probar fortuna con la caña y poner a prueba su pericia.