San Vitero ofrece casa, trabajo y una huerta a aquella familia que, estudiadas todas las solicitudes, sea seleccionada para irse a residir a San Vitero. Una vez elegida el primer paso será el empadronamiento de todos los miembros de la familia para así poder formalizar los trámites de preinscripción de alumnos en la Dirección Provincial de Educación antes del día 5 de mayo, con lo cual se evitará la orden de cierre del colegio. A partir de ahí quedaría el resto de la primavera y el verano para hacer la inscripción definitiva. Ayer el alcalde Rafael Caballero no daba abasto a atender llamadas de familias interesadas en recalar en San Vitero.

La residencia se fijará en la casa rectoral de la parroquia de San Víctor Bracarense tras llegarse al acuerdo de cesión gratuita por parte de la Diócesis de Zamora.

En tiempos de crisis y desempleo obviamente una de las cosas que más llamó la atención fue la oferta de un puesto de trabajo digno. Ello podrá ser gracias a la generosidad de una empresa familiar de San Vitero, que ademas cuenta con niños: uno de los miembros de la familia que llegue podrá trabajar en la panadería. De ahí que uno de los requisitos exigidos fuera el de contar con carnet de conducir. La persona desempleada se reunirá con la empresa y si reúne las condiciones se le realizaría un contrato inicial por un año. El Ayuntamiento de San Vitero se compromete además a la búsqueda y apoyo de ofertas de empleo futuras que capitalicen los asentamientos en el pueblo a corto y a medio plazo.