La Guardia Civil explica que la bromadiolona "es sustancia cuyo funcionamiento se basa en la inhibición de la síntesis de fabricación de la Vitamina K, fundamental para la creación de factores de coagulación de la sangre". Se añade que los animales que consumen estos compuestos mueren por graves hemorragias internas, , convirtiéndose el compuesto en altamente contaminante dada su capacidad de acumularse en los tejidos. También se remite a la Organización Mundial de la Salud (OMS), para indicar que la bromadiolona "es un anticoagulante de segunda generación, extremadamente tóxico para los mamíferos, lo que supone un elevado riesgo de envenenamiento e intoxicación hacia especies no diana". A la vista de los avances la Guardia Civil procedió a investigar al vecino sayagués como supuesto autor de un delito relativo a la protección de la flora, fauna y animales domésticos. Afirman que "practicas como el envenenamiento constituyen un peligro grave y concreto para la fauna, especialmente para las especies más amenazadas. En determinados casos puede afectar a la salud pública, (función del lugar y del tipo de cebo utilizado) dada su repercusión en la cadena trófica, al pasar el veneno de unos animales a otros.