Autoridades, agentes sociales y naturalistas de Portugal consideran "una amenaza muy grande y grave" para el ecosistema de la región fronteriza de Tras Os Montes la construcción de una mina de cuarzo a cielo abierto en el conocido como "Monte Pedroso", de Nuez, separado de la aldea de Quintanilha , perteneciente al concelho de Braganza, solamente por las aguas internacionales del río Manzanas. Nueve años después de nacer el proyecto, con fuerte oposición en España, renace la polémica en Portugal. El presidente de la Junta da Freguesía de Quintanilha Jose Fernandes afirma que "el río va a terminar contaminado porque la escorrentía de las aguas va a terminar en el Manzanas". Uno de los temores es que las partículas de la cantera terminen en el río y las arrastre hasta Vimioso donde aproximadamente la mitad de su población se abastece de ellas. La preocupación en la villa es manifiesta. Aunque en el estudio no se aclara si la cantera va a contaminar o no las aguas superficiales del río Manzanas, durante el período de exposición pública en Portugal el concelho ya ha presentado su "absoluta oposición".

En su día el Estado Portugués solicitó a España un documento que identificará y evaluase los impactos en el territorio luso. No fue hasta septiembre de 2016 cuando dicha documentación llegó a la Agencia Portuguesa do Ambiente, a través de la Embajada de Portugal en España (Madrid), considerándose entonces promover una nueva exposición publica. Cinco meses después el miedo y el rechazo es patente en Portugal: no quieren mina de cuarzo en El Pedroso.