Isidro Tomás Fernández asumió las riendas del Servicio Territorial en plena crisis de las vacas locas, que tocó de lleno en Zamora donde saltó un caso en una explotación de Argujillo. Pero 16 años es una etapa lo suficientemente prolongada como para lidiar con numerosos asuntos en una provincia eminentemente agrícola y ganadera. Entre todos las actuaciones destaca el protagonismo de Isidro Tomás en la transformación de los regadíos de Tábara, proyecto que él mismo redactó siendo jefe del Servicio Territorial y que supuso una de las inversiones más importantes de los últimos años en Zamora, por encima de los 24 millones de euros. Una obra que tuvo sus más y sus menos, con unos inicios complicados por las deficiencias surgidas pero que, ya a pleno rendimiento, ha modernizado la actividad agrícola en una zona tradicionalmente de secano. El conflicto del ganadero de Peque, que se arrastra desde 2007, ha sido otros de los quebraderos de cabeza del hasta ahora jefe de Servicio.

Isidro Tomás pertenece además a las filas del Partido Popular, a las que ha representado como alcalde durante un mandato en su pueblo de Pozuelo de Tábara. En las últimas elecciones municipales volvió a concurrir como candidato pero no salió. El alcalde es Jesús Ángel Tomás, primo suyo, que va por el PSOE.