La explotación ganadera de Francisco Martín Martín, situada en Ceadea -municipio de Fonfría-, ha sido objetivo de un ataque de lobos que causó la muerte a doce de sus más de 600 ovejas en el paraje conocido como "Majada Linares".

Los cánidos atacaron al atardecer aprovechando la escasez de luz, y según las averiguaciones llevadas a cabo por los agentes medioambientales de la Comarca Forestal de Aliste, los responsables de la muerte de la docena de ovejas fueron tres lobos que, no contentos con ello, dejaron allí su firma, varios excrementos con restos de lana de oveja, algo muy común y característico en estos depredadores tras alimentarse del ganado ovino. El ganadero ya dispone del informe de los agentes para poder cobrar la correspondiente indemnización de la Consejería de Fomento y Medio Ambiente.

Francisco Martín Martín es un ganadero que, muy de vez en cuando, sufre los ataques en su rebaño y ha asumido que el lobo es muy listo y seguirá teniendo bajas en su cabaña aunque sus 12 mastines sean fieles guardianes.

Sin embargo, en esta ocasión el ganadero se mostraba muy enfadado porque al igual que le ocurriera el año pasado, los ataques se producen en estos meses de otoño e invierno, entre octubre y febrero, "justo en la época en la que los gestores cinegéticos están cebando los puntos de aguardo para abatir los lobos autorizados de los cotos de caza". Ceadea y todos los pueblos que lo rodean tienen lobos autorizados para abatir en esta época del año, de ahí que las manadas de lobos encuentren la comida fácil en esos cebaderos y deambulen por la zona a sus anchas.