Al grito de "Fuera antena", vecinos de los barrios de Varela y San Francisco de Puebla de Sanabria volvieron a salir ayer a la calle para reclamar la salida de la torre de telefonía del casco urbano y denunciar de nuevo la "evidente problemática de salud" que está provocando la instalación.

Los manifestantes expresaron su preocupación por los "evidentes trastornos de salud" que pueden provocar las antenas de telefonía móvil. Y ante quienes cuestionan esta inquietud responden que "jamás hemos visto a a ningún experto que nos haya venido con datos en la mano y nos lo haya demostrado".

En un comunicado leído durante la concentración, los vecinos apuntaron que "cuando existe la menor duda de que este tipo de antenas pueden ser dañinas, posicionarse en el campo contrario es posicionarse contra el derecho a la salud de las personas". Y a las críticas por una posible falta de cobertura para el pueblo si se saca la antena del casco urbano responden que "en el alto de Ungilde operan otras compañías y por lo tanto la red está garantizada"; por lo tanto "Telefónica bien puede irse allí".

Los manifestantes estuvieron acompañados por representantes del Ayuntamiento, tanto el alcalde, José Fernández, como concejales del PP y el PSOE, además de miembros de Podemos. En el acto de protesta los vecinos expusieron los problemas de salud que pueden originar las radiaciones. "Depresión, dolores de cabeza, insomnio, cáncer, infartos, aneurismas, taquicardias, derrame cerebral, vértigos, ansiedad, encefalitis herpética, abscesos cerebrales, ictus, alzhéimer, desprendimiento de retina? Son solo algunas de las enfermedades que pueden ocasionar este tipo de radiaciones".

Además lamentaron que Sanidad no haya respondido a las peticiones de un estudio epidemiológico. Los frentes protagonizados por estos vecinos de Puebla han llegado también a las Cortes "porque creemos que la actual ley que regula las antenas de telefonía es insuficiente, por eso vamos a hacer lo posible por cambiarla".

Igualmente han recogido firmas. "Sabemos que la lucha va a ser larga, dura y contra un enemigo poderoso, pero sabemos que juntos somos invencibles y podremos conseguirlo.

La protesta terminó con una cacharrada y música y canciones llamando a la resistencia.