Las obras de la carretera que comunica Coreses con Molacillos han comenzado con los trababajos de regularización superficial del firme y comprende los 10 kilómetros de la carretera ZA-711, que une la N-122 y la CL-612 y que soporta un tráfico medio diario de alrededor de 790 vehículos. El presupuesto total asciende a más de 370.642 euros, aportados por la Junta.
Según la información oficial, la intervención consiste en la "extensión de dos capas de mezcla bituminosa en caliente, siendo la primera de regularización". La capa de rodadura se aplicará a los casi 10 kilómetros, a excepción del tramo del paso superior sobre el ferrocarril, en el que no se contempla actuación por estar en buen estado. Según los datos de la Junta, la mezcla bituminosa en caliente con betún "contiene aditivos de polvo de caucho, un material que contribuye al retraso de fisuras en el pavimento y facilita el uso de un residuo como son los neumáticos fuera de uso".
Las obras concluirán previsiblemente en un mes, cuando se reperfilen las cunetas, se sustituya la señalización vertical y se pinten las marcas viales de toda la carretera.
