Los dos grandes embalses zamoranos de Almendra y Ricobayo descienden sus cotas y rebajan sus volúmenes de agua a unos niveles inferiores cada día. El embalse del Esla, con una capacidad de 1.200 hectómetros cúbicos, alberga en estas fechas 493 hectómetros, y el gran cuenco de Almendra, con capacidad para 2.648 hectómetros cúbicos, dispone en estos momentos 1.915, un total de 46 hectómetros cúbicos menos que la pasada semana.

Prácticamente todos los pantanos susceptibles de acoger avenidas están listos para recibir de buena gana las precipitaciones que puedan darse, aunque se resisten a caer a estas alturas del año, pero que rondan en el firmamento.

Los caudales vertidos a los ríos desde los embalses obedecen a las propias turbinaciones de las centrales o a las limitadas concesiones exigidas por los caudales ecológicos.

El embalse de Almendra mantienen en estas fechas un caudal vertido al río Tormes de 1,84 metros cúbicos por segundo, que supone un recorte respecto al volumen soltado en verano, elevado este año a 2.500 litros por segundo.

No obstante, esta suelta se mantiene dentro de los parámetros establecidos por la Confederación Hidrográfica del Duero.

La tendencia del embalse zamorano-salmantino es la baja, tanto en el volumen almacenado como en caudal vertido, y sus niveles actuales solo son algo inferiores a los de pasado año.

Por lo que respecta al embalse del Esla, el depósito de agua actual es de 493 hectómetros cúbicos, que supone una reducción de 44 hectómetros en relación a la pasada semana, no registrándose vertido alguno según la última información facilitada por el Sistema Informático de Información Hidrológica de la Confederación Hidrográfica del Duero del domingo.

En la cuenca del Tera, con los embalses encadenados en todo su tramo medio, Cernadilla cuenta con un total de 48 hectómetros cúbicos almacenados de una capacidad que alcanza los 255, casi 30 hectómetros cúbicos menos que el pasado año a estas fechas. Vierte casi 5.000 litros por segundo que van directos al embalse de Valparaíso, donde quedan depositados enteramente al no registrarse vertido alguno. Este gran vaso, con capacidad para 163 hectómetros cúbicos, acoge estos días 154 hectómetros. Es de resaltar que la provincia de Zamora cuenta con embalses de gran capacidad sometidos a oscilaciones de nivel a lo largo del año, al depender de las precipitaciones y del uso que se haga del agua embalsada con la generación hidroeléctrica, como es el caso de Almendra, Ricobayo o Cernadilla.

En los embalses diseminados por las sierras de la Alta Sanabria el aprovechamiento es más apurado si cabe por cuanto que se trata de cuencos de mucha menor capacidad, y todos están sedientos de las lluvias.

El embalse de Puente Porto, con capacidad de 23 hectómetros cúbicos no tiene más que uno. Por lo que respecta a los embalses de la cuenca del Bibey, San Sebastián está al 32 por ciento de su capacidad y Pías al 50 por ciento.