La carretera de Porto sigue siendo una asignatura pendiente que todos quieren aprobar pero que nunca parece superarse.

Con un "queremos ver las máquinas" alentaba ayer el sindicalista José Manuel Soto la concentración convocada por la Alianza Coag-UPA en demanda de la vía de comunicación, organizada en Porto de Sanabria. Al acto asistieron cerca de 120 personas de los pueblos de Alta Sanabria y Galicia, e incluso algún vasco que se acercó a la villa portexa con motivo de la última feria ganadera del año.

Los representantes del PSOE por Zamora respaldaron la protesta y estuvieron presentes el senador José Fernández Blanco; el procurador José Ignacio Martín Benito, el diputado Manuel Santiago Sánchez y el presidente de la Mancomunidad de la Alta Sanabria, Felipe Lubián Lubián, además del representante de UPA, Pedro Fernández. Concejales de Porto también secundaron la protesta, al no asistir la alcaldesa por motivos personales.

Soto exigió a la Junta que ponga en marcha los planes para frenar la despoblación "empezando en Porto" y la reforma integral de la única vía de comunicación a estos pueblos, dejando en evidencia todos los incumplimientos de mejorar la vía, ya comprometidos desde el propio Manuel Fraga y Juan José Lucas.

Tras estas nominaciones, Soto encadenó la lista de políticos con incumplimientos, incluido Feijó y Herrera, con "más promesas, más compromisos y más mentiras". El representante de COAG invitó al consejero de Fomento a visitar personalmente Porto.

Las pancartas vecinales recordaban que "la Alta Sanabria genera en impuestos al año, por la energía eléctrica, el equivalente al coste del proyecto de 2011 de la carretera ZA 102". Y de impuestos se acordaron el representante de agricultores y ganaderos para recordar que los presupuestos "salen del mismo cajón", pero se destinan para recuperar unas autopistas deficitarias, mientras se escatima la inversión en el pueblo más alejado de Zamora. Recordó que Porto "está donde está en el mapa, y no es el fin del mundo".

Los vecinos también señalaban bien visible en una pancarta que "Por Justicia y equidad, por dignidad, por nuestro futuro exigimos la ejecución del proyecto 2011". Los propios vecinos cerraron la concentración con un tímido "Carretera ya". El concejal de Porto, Francisco Blanco, apuntaba que las personas mayores que residen en el pueblo usan poco la carretera, pero cuando la usan "es para ir al médico, al hospital o a las urgencias en el hospital de Verín". Como concejal de la corporación indicó que "desde el Ayuntamiento no tengo ningún conocimiento de cómo está ahora el tema de la carretera".

Manuel Pérez San Román es uno de los vecinos gallegos, de A Veiga, que ayer leyó la cartilla a los políticos. "Dejaron las fincas mejores de los pueblos debajo del pantano y, ahora que los tiempos han cambiado, exigen lo que a ellos les hace falta" expresó. "A nosotros también nos favorece para el acceso a Galicia y la Xunta también debería tomar parte" añadió. De hecho la ZA 102 recorre a tramos una y otra provincia, una y otra comunidad. Pérez, de madre sanabresa de Remesal, recalcó que en Valdín todos los hombres en edad de trabajar eran canteros y se desplazaban a toda la comarca de Sanabria a construir casas, paredes e iglesias. "De niños, nuestros juegos eran hacer paredes con piedras", dice en un gallego de frontera, sin olvidar que los canteros hablaban una jerga propia "varrallote" para que nadie les entendiera, aunque "alguna sanabresa sí les entendía".

Desde hace 20 años uno de los compradores vascos frecuenta la carreteras que discurren desde Lasarte, en San Sebastián, hasta Porto, y reconoce que está fatal. Da cuenta del pulpo con el ganadero de Porto, José Antonio Bruña, que ha tenido la suerte de vender antes de esta última feria 28 animales.