Esta vez no ocurrió en la provincia de Zamora sino en la de Valladolid, y no fue en una carretera nacional sino en la autovía A-6, entre Rueda y Medina del Campo. La víctima, un vecino de Morales del Vino, Andrés Luis Romera, quien el pasado domingo se disponía a disfrutar de un día de asueto en la Feria de la Tapa de Olmedo.

Un jabalí frustró la jornada dominical. Hacia la una de la tarde, circulando a 120 kilómetros/hora, a la altura del kilómetro 167,600 en dirección a Madrid, "apareció de forma imprevista delante de mi vehículo un jabalí de unos 180 kilogramos, según estimación de los agentes de Tráfico que realizaron el informe del accidente".

Como explica, indignado, el propio conductor, el animal "salió rebotado hacia la mediana de la autovía falleciendo en el instante, y mi vehículo sufrió graves daños que me imposibilitaron proseguir mi viaje".

"Afortunadamente todo ha quedado en un gran susto y unas molestias en las vértebras superiores de la columna, pero estoy convencido de que me salvó la vida el tipo de vehículo que conducía, ya que si hubiera circulado con otro el accidente hubiera tenido una gravedad mayor para mi persona, que tal vez que hubiera impedido escribir estas líneas".

En su condición de víctima y también como auditor de Seguridad Vial, Andrés Luis Romera hace un llamamiento a los gobernantes "para que implementen medidas reales para solucionar el grave problema que la fauna salvaje está generando no solo en los campos sino sobre todo la inseguridad vial que nos ocasiona a todos".

"Hasta ahora pensaba que el riesgo lo teníamos al circular por carreteras nacionales, autonómicas o provinciales, pero con el hecho que he vivido en primera persona, tengo la certeza de que no estamos seguros ni en las autovías, a las que teóricamente la fauna salvaje no podría acceder por la existencia de vallas perimetrales de seguridad, lo que debería provocar que se viese obligada a atravesar estas vías por los pasos de fauna habilitados al efecto".