A la alarma creada por el mal olor del agua se sumó ayer la información difundida por el SINAC (Sistema de Información Nacional de Aguas de Consumo), dependiente del Ministerio de Sanidad, situando a cuatro pueblos de Sayago: Bermillo, Almeida, Muga y Villar del Buey con el agua "no apta para consumo" debido a los altos índices de Trihalometanos. Un problema que, según el presidente de la Mancomunidad, "no tiene nada que ver con lo que ha pasado ahora", ya que "aquello se corrigió en cuanto nos lo advirtieron". Fue el 25 de agosto cuando la Consejería de Sanidad realizó una toma de muestra en determinados municipios de Sayago, tras la cual se detectaron los altos índices de Trihalometanos. El 2 de septiembre la propia Junta comunica los resultados a la empresa Sayagua Servicios, que lleva la gestión del agua, para que "a la mayor brevedad" tome las medidas oportunas. De tal incidencia no se informó los ayuntamientos "porque lo solucionamos rápidamente" justifica Carlos Vega. Sin embargo la sorpresa fue mayúscula cuando en ayuntamientos como el de Almeida el miércoles se recibía una carta de la Consejería de Sanidad comunicando el problema que se detectó en agosto y recordando al Ayuntamiento la obligación de velar por las buenas condiciones del agua para su consumo. La comunicación llevó al alcalde de Almeida, Miguel Alejo, a mandar un escrito urgente al presidente de la Mancomunidad después de no tener conocimiento durante todo este tiempo de ninguna de las medidas tomadas y para asegurarse de que el agua cumple todos los parámetros.